Euseglimar González | LA PRENSA DE LARA.- Jorge Manuel Peraza Silva, de 24 años, detenido en la Comunidad Penitenciaria Fénix Lara murió por presunta desnutrición e insuficiencia respiratoria. El hombre cumplía una condena de 19 años por asesinar a su novia de 23 años.
A Jorge lo trasladaron la noche del domingo desde Fénix, pues estaba muy mal y casi no podía respirar. Personas que estaban en los alrededores de la emergencia del Hospital Central Antonio María Pineda vieron cuando lo trasladaron, detallaron que el chamo no se movía y estaba muy delgado, minutos después murió.
En mayo de 2018 a Jorge lo detuvieron junto a su papá Ramón Arcadio Peraza (70), este por ser el cómplice del femicidio de Johana Aurimar Blanco Luque (23). Ramón fue detenido y condenado por el delito de femicidio agravado en grado de cooperador inmediato, pero el 17 de mayo de 2020 murió dentro del penal Fénix, donde cumplía su pena.
Tanto Jorge como Ramón permanecieron recluidos en los calabozos del Eje de Homicidios del Cicpc durante dos años y fue a finales de octubre del año pasado que fueron trasladados a la cárcel de Fénix.
El 12 de mayo de 2018, Johana estaba en la casa de su novio Jorge, ubicada en la parte alta del cerro Rómulo Betancourt. Supuestamente, Jorge tenía una parranda con su papá, Ramón y sus hermanos Moisés y Junior Peraza.
Johana y Jorge comenzaron a discutir y minutos después se escuchó un disparo, la joven recibió un impacto de bala en el abdomen y cayó muerta en la sala. El novio junto a sus dos hermanos y su padre envolvieron el cuerpo con unas sábanas y lo arrastraron hasta un pozo en el patio de la casa donde fue sepultada.
Los vecinos se percataron de lo ocurrido y notificaron a los cuerpos de seguridad. Por el crimen fueron detenidos padre e hijo, pero casi tres años después, los otros dos cómplices siguen fugados.