Euseglimar González | LA PRENSA.- Le roban la moto y le quitan la vida. Seis tipos atracaron a Alfredo Antonio Silva Linárez (33) y lo asesinaron de un disparo en la cabeza ayer en la mañana en el sector Tintinal de Sanare. Los criminales interceptaron al hombre luego de salir del monte donde estaban escondidos.
Relatan que Alfredo salió de su casa, a pocos metros del hecho y a las 6:00 de la mañana, aproximadamente, iba pasando por el río cuando lo atacaron. Señalan a miembros de la banda del “Bocanegra” como los implicados en el crimen.
Antes de que a Alfredo lo asesinaran, dos personas ya habían sido víctimas de los seis malandros. Hicieron el mismo modus operandi: salieron del monte y les quitaron las motos, pero a ellos les amarraron las manos y los amordazaron. Detallan que se los llevaron hasta el monte en donde ellos se escondían.
Una de las víctimas contó que los seis hombres le salieron a Alfredo y comenzaron a discutir, aparentemente él se resistió al robo. Fue justo en ese momento en el que uno de los tipos le disparó en la cabeza a Alfredo, dejándolo muerto de inmediato. Los criminales luego de cometer el homicidio huyeron de la zona en las motos.
Antes de matar a Alfredo, supuestamente, le comieron la comida a los agricultores que fueron víctimas de rapto, mientras que estaban amordazados y maniatados.
El sector en donde fue asesinado Alfredo está a una hora de Sanare, la carretera es de tierra y por la zona hay muchos sembradíos.
Supuestamente, los de la banda del “Bocanegra” lograron robar tres motos en el río. Vecinos del sector aseguran que los hampones están acostumbrados a robar por la zona.
La mayoría de los agricultores salen de madrugada a trabajar en sus tierras. Los choros están pendiente para robarles las motos, el principal medio de transporte de la mayoría de los que vivimos aquí”, comentó una vecina.
Funcionarios del Eje de Homicidios del Cicpc llegaron hasta la escena del suceso para hacer las experticias del hecho y el levantamiento del cuerpo. Se conoció que manejan el móvil del asesinato como resistencia al robo. El cuerpo fue llevado hasta la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda.
Los familiares de Alfredo no quisieron dar detalles de lo sucedido, estaban desconsolados y aseguraban no saber nada.