LA PRENSA.- La crisis económica que atraviesa el país ha afectado al empresariado general. El primer vicepresidente de Fedecámaras, Carlos Larrazábal, sostiene que el 2016 cerró con la mayor caída en la historia venezolana.
Durante una entrevista para Unión Radio, comentó que fuentes vinculadas con la banca indican caídas entre un 12 % y 18 % de Producto Interno Bruto.
Larrazábal destacó que hay casos donde a la empresa le resulta más costoso cerrar por la inamovilidad rígida, que dificulta salir de cualquier personal cuando la empresa está en situación crítica.
Apunta que hoy en día es casi imposible reducir la nómina en un 5% o 10% para salvar la compañía porque se tiene que pagar bonificaciones inmensas y «en vez de reducir el 10% la nómina pones en riesgo a la empresa en su totalidad porque si no hay flujo de caja para pagar, cómo se hace”.
“En ninguna parte del mundo los aumentos y los controles han solventado el tema de la inflación».
Opina que la solución está en manos del gobierno y en acabar con la inflación.