LA PRENSA DE LARA | Agencias.- Este domingo 25 de septiembre el papa Francisco dedicó unas palabras a los afectados por el volcán de la isla española de La Palma. De igual forma, abogó por la inclusión de los migrantes y refugiados alrededor del mundo.
Al término del rezo dominical del Angelus, el papa Francisco se manifestó expresando su «cercanía y solidaridad» por los habitantes de La Palma. Frente a varios cientos de personas en la plaza de San Pedro del Vaticano, el sumo pontífice lamentó las consecuencias de la prologada erupción volcánica en la isla española.
«Expreso cercanía y solidaridad a quienes se han visto golpeados por el volcán en la isla de La Palma, en Canarias», dijo el papa. Asimismo aseguró que pensaba «especialmente en quienes se han visto obligados a dejar sus casas» y pidió rezar por ellos a Nuestra señora de las Nieves.
El domingo 19 de septiembre en horas de la tarde entró en erupción el volcán de La Palma, Cumbre Vieja, tras más de una semana se seísmos. En los días previos a la erupción se registraron más de 25.000 pequeños terremotos en la zona de Las Manchas.
Hasta el momento se han evacuado más de 6.000 personas debido a la actividad volcánica que continúa por octavo día consecutivo. La columna de gases alcanzaba cotas de 4,2 kilómetros de altura, mientras que el avance de la lava ha cubierto 212 hectáreas, destruyendo 460 edificios y 15,2 kilómetros de carreteras.
Afortunadamente no se han registrado daños personales, y las personas se encuentran en en domicilios de familiares o amigos, o bien en refugios acondicionados con camas, comida y atención permanente.
Inclusión para los refugiados
Hoy, cuando se celebra la Jornada Mundial de los migrantes y los refugiados, el papa dedicó palabras para los más desamparados. El sumo pontífice aseguró que la Humanidad está llamada a «construir un mundo siempre más inclusivo» que acoja a todos «sin prejuicios».
«Es necesario caminar juntos sin prejuicios, sin miedo, poniéndose al lado de los mas vulnerables, migrantes, desplazados, víctimas de trata, abandonados», dijo al término del rezo dominical del Angelus. «Estamos llamados a construir un mundo siempre más inclusivo, que no excluya a nadie», añadió, recordando el lema este año de la celebración: «Hacia un nosotros siempre más grande».
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