LA PRENSA.- Paredes agrietadas, fachadas sucias o dañadas por las personas y casas sin techo, marcan parte del patrimonio cultural de Iribarren. La historia de la capital de Lara representada en la arquitectura de época ha ido desapareciendo por el deterioro y la falta de compromisos de las autoridades, pues según Iván Brito, costumbrista, desde hace 20 años gobernantes sólo se han dedicado “a pintar fachadas”.
Brito detalla que el casco histórico de Barquisimeto está completamente desasistido por la falta de una sede regional del Instituto para el Patrimonio Cultural en Lara, lo que señala dificulta aún más poder mantener en buen estado el patrimonio de Iribarren.
Precisa que en el municipio existían al menos 150 inmuebles con valor histórico y hoy sólo quedan escasos 40 espacios, “algunos fueron vendidos y otros se perdieron por las malas condiciones”, Brito explica que por la crítica situación es indispensable volver a inventariar para saber con que cuentan en el municipio.
Sin embargo ve con dolor como “hay indolencia e indiferencia por la historia hecha estructura”, por lo que ratifica que la alcaldía debe comenzar a tomar conciencia y hacer propia la historia municipal.
A esta queja se une la concejal de Iribarren Milagros Gómez de Blavia, quien explica que la atención prioritaria a brillado por su ausencia, agrega que nos es solo hacia el patrimonio histórico sino que se extiende hacia las obras de arte y monumentos a lo largo de la ciudad y el estado.
Un ejemplo es el monumento al sol, una obra emblemática del estado que ya no tiene el mismo brillo de su inicios” exclamó con indignación.
Sin embargo rescata que actualmente exista al menos una recuperación en tránsito como la de “La casa bonita” ubicada en la calle 17 con carrera 24, diagonal a la Plaza de la justicia. Allí la gobernación inició una recuperación desde hace al menos un años, obra que no ha sido culminada pues requiere de tratamientos espaciales.
Brito menciona que la recuperación de una vivienda con denominación de patrimonio debe realizarse con los materiales de la época para no alterar de su origen, “esto permite mantener su esencia de patrimonio histórico”, explicó.
El ciudadano de a pie también ha notado las desmejoras en el casco histórico, Belén Herrera, que se encontraba en la plaza de Bolívar de Iribarren, menciona que la casa de Eustoquio Gómez y us alrededores han perdido el valor histórico, hace un llamado al alcalde para que inicie una jornada de recuperación pues considera que el casco histórico “debe ser un símbolo de ciudad”.