Luis F. Colmenárez | LA PRENSA DE LARA.– Esto no es ninguna protesta es simplemente una consecuencia de la paralización de las refinerías del país». Así responde Antonio Escalona, presidente de la Unión Agrícola y Ganadera de los Andes (Unagandes), a la decisión del Ministerio Público de dar inicio a una serie de investigaciones en contra de los productores que han desechado sus cosechas por no tener combustible para poder distribuirlas.
«Nosotros somos los principales afectados. Invertimos meses de trabajo para sacar adelante las cosechas, pues ahí está la estabilidad de nuestros hogares y el sustento de nuestras familias. Nosotros somos los menos interesados en botar la producción«, comenta.
Asegura que desechar los alimentos que son altamente perecederos no es su primera opción. No obstante, resalta que si no tienen combustible para llevarlos a los diferentes puntos de recolección, mucho menos para distribuirlos en colegios, hospitales, ancianatos y en las comunidades que pudiesen necesitarlos. «Nosotros únicamente estamos evitando que se nos pudra en la puerta de la casa«.
En el caso particular de los productores del municipio Torres, su principal preocupación hasta ahora es la leche. Y es que el derivado de la vaca si no se le da un buen almacenamiento puede dañarse en cuestión de minutos.
Rafael Carrasco, de la Unión de Campesinos y Productores de Torres, explicó que las personas han comenzado a elaborar queso para evitar perder miles de litros. No obstante, están sumamente preocupados, ya que temen que la oferta sea más alta que la demanda y terminen perdiéndolo todo.
«En la zona donde yo estoy bajábamos 14 mil litros de leche al día, eran 14 camionetas. Ahorita sólo están trabajando 22 motos y no llegan ni a los dos mil litros. Eso quiere decir que son 12 mil litros que se están quedando allá y con los que toca hacer queso hasta para tirar para arriba«, dice.
En ese sentido, Escalona pide al Estado poner manos a la obra y activar un plan de contingencia para que los productores del país que son los encargados de garantizar el alimento de los venezolanos puedan contar con el combustible necesario para poder llevarlos hasta los distintos puntos de venta.
«Hoy los productores agropecuarios somos los señalados de hambrear al pueblo y se les olvida que somos parte de ese pueblo hambriento«, dijo.