Cristina Linárez | LA PRENSA.- El que se registraran cuatro casos de colitis infecciosa en mes y medio por un colapso de cloacas encendió las luces de alarma en los hogares de la comunidad Tarabana 3 de Palavecino y en la escuela de la zona, quienes ayer a las 6:30 de la mañana se unieron para trancar la vía principal y exigir a Hidrolara que les resuelva.
Lo que comenzó como un hilito de agua piche que salía de un pequeño orificio que hay en el pavimento de la avenida principal es ahora un gran río pestilente que inunda toda la vía. La preocupación para las familias se acrecienta cada día por la proximidad de la escuela estadal Luis Beltrán, pues temen que se enfermen los niños.
Tres residentes de la zona expresaron que es primera vez que realizan acciones de protesta. El tener mes y medio con las tuberías colapsadas los llevó a restearse y con más ahínco luego que llegara una comisión de Hidrolara que no resolvió nada.
“Hidrolara medio arregla el problema, y al poco tiempo vuelve a colapsar y tenemos que volver a calarnos el hedor, necesitamos que hagan un cambio completo de tubería para ponerle fin a este problema que ya va para dos años”, expresó Briseida Suárez, una residente de Tarabana 3, quien tiene a su esposo con una bacteria en el estómago y no ha podido recuperarse por este problema.
Además de los riesgos que corre la comunidad de contraer enfermedades, se suman ahora con el reinicio de clases los estudiantes de la escuela estadal Luis Beltrán. Los representantes, quienes también participaron en la tranca expresaron que el viernes llegan los alimentos del Programa de Alimentación Escolar a la institución y les preocupa que por las condiciones insalubres que hay en la zona se vayan a dañar los alimentos o peor aún se genere una epidemia infecciosa, en la que los niños sean los más afectados.