Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- La cosecha del maíz y el ciclo de invierno terminó en noviembre y los productores de Portuguesa, Barinas y Guárico quedaron endeudados porque el precio que les pagó la agroindustria fue 15% menos que en 2022, debido a la caída de los precios de este commodities en el mercado internacional. Así lo informó Ramón Bolotín, director oleaginosas y leguminosas de Fedeagro.
«El 70% de los productores de maíz quedaron con deudas», exclamó. Son varios factores lo que hizo que los agricultores de cereales estén en saldo rojo. El primero fue por el tiempo extremo que enfrentaron, porque mayo fue un mes de poca lluvia y junio, julio y agosto fueron extremadamente lluviosos, por encima de lo que se esperaba y eso afectó el rendimiento.
Según cuenta Víctor Castillo, productor del estado Portuguesa, se esperaba un rendimiento de entre 5000 y 6000 kilos por hectárea, pero la gran mayoría obtuvo un rendimiento de 4000 kilos por hectárea o 3500 kilos. «La superficie sembrada fue mayor, pero la producción no porque cayeron los rendimientos», añadió Bolotín. Aunque no hay cifras oficiales, en Portuguesa donde se produce el 60% del maíz que consume Venezuela cultivaron unas 178 mil hectáreas de maíz entre blanco y amarillo.
Saúl Elías López, presidente de la Sociedad Venezolana de Ingenieros Agrónomos, precisó que el área sembrada de maíz en el año 2022 fue de 250 mil hectáreas, este año fue de 350 mil hectáreas. «En total, se produjeron 1350 toneladas, eso es un incremento de 35% este año», expresó. El 65% es maíz blanco para poder elaborar la harina precocida, con esa cantidad se abastece el mercado nacional por siete meses. En cuanto al maíz amarillo que se utiliza para los alimentos de aves y cerdos, se produjo el 35% que alcanza para abastecer la demanda unos tres meses.
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