Gabriel Grisanti | LA PRENSA.- En la calle 10 con calle El Samán del sector 4 de La Carucieña, del pasado miércoles 3 de agosto después de las 8:30 pm el clima frío tenía encuevados a los vecinos en sus viviendas viendo televisión, cenando y compartiendo con otros miembros de sus familias.
Todo estaba bajo total normalidad, hasta que 10 minutos después, desde la calle El Samán por la que se llega al sector La Pedrera salieron repentinamente dos tipos accionando sus armas de fuego.
Extraoficialmente, se supo que los delincuentes tenían como objetivo asesinar a un hombre que se había detenido por un momento allí a conversar con otras personas conocidas.
En medio de la plomazón, quien se había convertido en un blanco corrió a la velocidad que los nervios le permitieron para buscar su resguardo; de repente, cuando sube por la calle 10 que comunica al resto del sector 4 de La Carucieña, optó por lanzarse sobre el pavimento.
En ese momento, se había topado con una comisión de funcionarios pertenecientes a la División contra Secuestro y Extorsión del Cicpc que estaban efectuando recorridos por la zona, quienes al ver que se trataba de alguien perseguido, lo cubrieron.
De inmediato, los choros no se cayeron a pasiones y enfrentaron a los integrantes de esta división conforme iban corriendo por un estrecho callejón de tierra por el que se accede a Lomas de León.
Ambos choros resultaron heridos y de allí trasladados en principio al ambulatorio de La Carucieña. Hasta las 10:40 pm del miércoles seguían con vida. Funcionarios de la División de Investigaciones contra Homicidios realizaron el levantamiento planimétrico.