Anaís Mendoza | LA PRENSA.- Una gandola cargada con casi 100 cochinos vivos se salvó de ser saqueada cuando transitaba ayer a las 10 de la mañana por la Circunvalación Norte, a la altura del sector La Estrella. Funcionarios de la PNB evitaron que los hampones de esa zona roja volvieran a hacer de las suyas.
Momentos de angustia vivió el conductor del camión que, supuestamente, pertenece a la empresa Alimex. El hombre sorteó que un grupo de 40 personas lo detuvieran de forma violenta y evitara que lo dejaran sin el producto porcino.
El ataque al transporte pesado, al parecer, no tenía ningún tipo de improvisación. Un grupo de hombres incluyendo menores de edad se atravesó en la vía mientras en las manos portaban piedras y palos. Algunos llevaban los rostros tapados con capuchas, y otros mostraban sus caras como si nada.
Apenas estos malandros lograron frenar la carga, otro grupo la rodeó y por las rejas, en donde se ubicaban los animales, intentaron abrirlas.
De hecho se logró conocer en el sitio que los hampones metían las manos por la protección de la gandola y tomaban a algunos marranos por las patas. Supuestamente, forzaban a los porcinos para intentar sacarlos entre los tubos.
Mientras esto pasaba, otro grupo de delincuentes apuntaba al conductor con armas de fuego y aprovechaban para robarle sus pertenencias: teléfono, viáticos y dinero personal.
Se espantan
Mientras los hampones actuaban, simultáneamente una comisión de la brigada motorizada de la Polinacional patrullaba La Estrella y pudieron percatarse de la turba rodeando y encima de la gandola.
Apenas se dirigieron hasta donde ocurría el intento de saqueo, todos los choros la piraron. En ese instante se iniciaron varias persecuciones pues los malandros se dispersaron.
El conductor se quedó al lado del camión y comenzó a dialogar con los funcionarios sobre lo sucedido. Un grupo de PNB del puesto de El Trompillo, al ver la acción se unió y también comenzó a peinar todos los cerros, de la Estrella y de El Trompillo.
Algunos residentes estaban nerviosos cuando vieron a la cantidad de funcionarios patrullando por el sector. El lugar quedó solo como si nada hubiese pasado, finalmente el conductor se montó en el camión y siguió su trayecto y aunque lo robaron no sufrió daños físicos. Los motorizados de la PNB peinaron calles de los diferentes barrios que se ubican a esa altura de la Circunvalación, pero no pudieron practicar ninguna detención.
No es la primera vez que en La Estrella cometen este tipo de delitos. La Prensa desde enero de 2017 lo ha denunciado.