Euseglimar González | LA PRENSA de Lara.- Tragedia familiar. Par de hermanos murieron por inmersión cuando se bañaban en el río del caserío Copipe, del municipio Urdaneta, aunque las personas que estaban en la zona trataron de auxiliarlos, al sacarlos sus esperanzas se desvanecieron cuando se dieron cuenta que no tenían signos vitales.
Se pudo conocer que Ramón Antonio Sánchez Perozo, de 23 años y su hermano de 14 años, estaban el viernes en la tarde en el río bañándose y al parecer el adolescente comenzó a ahogarse y habría sido en ese momento en el que Ramón nadó hasta donde él estaba para salvarlo, pero ambos se sumergían.
«Era como un remolino que lo estaba sumergiendo, todo pasó en cuestiones de minutos», soltó un habitante del caserío.
Las personas llamaron a Polilara de Siquisique para notificar lo que estaba ocurriendo, pues les informaron que dos personas se estaban ahogando, pero que no podían rescatarlo. Detallaron las fuentes policiales que un grupo de personas logró sacar a los jóvenes, pero cuando los acostaron en las orillas del río, ninguno de los dos tenía signos vitales.
Aunque los dos jóvenes estaban muertos, los familiares decidieron trasladarlos hasta el Hospital de Siquisique y los uniformados notificaron al Cicpc sobre lo ocurrido. Ese mismo día en la noche una comisión del Eje de Homicidios se trasladó hasta el municipio para hacer las experticias.
No fue sino hasta el sábado en la mañana que funcionarios del Cicpc trasladaron los cadáveres desde Siquisique hasta la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda.
LA PRENSA trató de ubicar ayer en la mañana a los familiares de los hermanos, pero no pudo ser posible, pues el sábado en la tarde los cuerpos fueron entregados y trasladados al municipio Urdaneta, donde los sepultarían.
Se conoció que Ramón trabajaba como obrero en Copipe, caserío en donde también residía junto a sus padres. Mientras que el adolescente de 14 años era estudiante, según versión policial.