Euseglimar González | LA PRENSA.- En medio de la sala de la casa de la familia Peña Uzcátegui estaban dos urnas, una de “Alexa” y la otra de su abuela, quien murió por causas naturales, mientras que los rostros de sus amigos y parientes se llenaban de lágrimas cada vez que veían las fotos del travesti asesinado a tiros el pasado sábado.
Alexis Enrique Peña Vizcaya (32) “Alexa” fue hallado sin vida en el caserío Palo de Olor en Torres. Tenía heridas en la cabeza por un balazo y en la pierna derecha.
“Chao, nos vemos”, fue lo último que escuchó Hilda Vizcaya, madre de “Alexa” cuando su hijo salió de su casa a las 9:00 de la mañana de La Playa de Santa Isabel. Relató que en ese momento se estaba bañando y sólo lo escuchó irse y pensó que se iba a la peluquería.
“Sólo Dios sabe el dolor que estoy sintiendo por su muerte. Al que le hizo eso a mi hijo Dios debe castigarlo y que sienta lo mismo que ahora estoy sintiendo”, soltó con lágrimas en su rostro la madre de “Alexa”.
El ataúd estaba completamente sellado, pues un primo de la víctima comentó que él había quedado irreconocible y que prefirieron velarlo con la urna cerrada. Sobre el féretro estaban todas las bandas que se ganó “Alexa” en los concursos gays, además de coronas florales.
La familia de Alexis contó que cuando él salió de su casa los vecinos no vieron nada. La Prensa se dirigió hasta la peluquería de “Alexa” y preguntó a los vecinos, pero tampoco lo vieron el sábado en la mañana.
“Me lo mataron, cómo alguien se puede meter con una persona inocente que no se metía con nadie”, decía la madre de Alexis ayer durante el velorio.
La pequeña casa de la familia estaba repleta de personas. Entre lágrimas y con música le dieron el último adiós al travesti. La comunidad Lgbti también estuvo durante el velorio.
“Su último adiós tiene que ser con música como a él le gustaba, siempre escuchaba vallenatos y raspacanillas”, contó uno de sus mejores amigos travesti, que no quiso identificarse.
Ayer en la tarde lo sepultaron junto a su abuela materna.