LA PRENSA.- ¿Cuál es el talón de Aquiles de los móviles? Si preguntas a los usuarios, seguro que una respuesta se repite: la batería. O sea, la necesidad de cargarlos constantemente, y la lentitud con que lo hacen. Los ingenieros se devanan los sesos para solucionar este problema, y un nuevo avance realizado en la Universidad Drexel, en Filadelfia (EE. UU.), acerca un poco más la posibilidad de que nuestros smartphones funcionen, por fin, con pilas de recarga ultrarrápida.
El electrodo de MXene tiene una estructura microporosa que permite a los iones (las partículas cargadas eléctricamente) tomar múltiples caminos “por autopistas de alta velocidad, en lugar de carreteras de una sola dirección, como en las pilas normales”, explica gráficamente Maria Lukatsakaya, investigadora que ha participado en el desarrollo del dispositivo. Así, las baterías que incorporaran los nuevos electrodos alcanzarían la elevada densidad eléctrica de los supercondensadores y sus prestaciones. Y a mucho menor coste.
Descubierto en 2011, el potencial del MXene está siendo puesto a prueba no solo como material para fabricar pilas, sino también en otras aplicaciones, como los filtros depuradores de agua.
Con información de Muy Interesante