Daimar Díaz | LA PRENSA de Lara – La escasez de gasolina en Barquisimeto comienza a pasar factura a las comunidades, pues los cisterneros han tenido que suspender o limitar la distribución de agua potable a las zonas donde no llega el servicio por tubería.
En los llenaderos se observan a choferes cargando los tanques, pero estos en su mayoría son privados. Los cisterneros relatan que han recibido propuestas de llenarlos a cambio de que realicen un viaje y lleven agua gratuita a una comunidad en Iribarren, dejando por fuera a Palavecino, sin embargo, los conductores comentaron que para apoyar en los diversos sectores que están en crisis, necesitan que les colaboren con el combustible, cuya solicitud no fue respondida por parte de las autoridades.