Guiomar López | LA PRENSA DE LARA.- El cansancio se evidenciaba en los rostros de los conductores que estuvieron el 24 de diciembre montando cacería para surtir gasolina. Se quejaban que la situación se repite desde hace aproximadamente cuatro añ;os, obligándolos a recorrer más de cinco estaciones y luego del mediodía fue cuando empezaron a surtir.
Eran personas preocupadas por asegurar el combustible para realizar las compras de última hora, trasladarse a celebrar la Nochebuena en las casas maternas y hasta conductores de rapiditos necesitando el tanque lleno para seguir trabajando este lunes.
«Uno se aguanta esto por necesidad, pero ya es costumbre en Barquisimeto», reclamaba Martín Roberti, quien estaba desesperado porque luego de las 3:00 pm era que iba a equipar. Necesitaba los 70 litros para trabajar este lunes en su ruta hacia Falcón. Era tiempo perdido y que pudo compartir en familia.
Fanny Campos también había recorrido varias estaciones del centro, oeste y estuvo varias horas en la cercana a Los Próceres. «Es insólito que al faltarnos poco para ser atendidos cierran porque se termina el combustible», se queja y se molesta por todas esas horas perdidas con la incertidumbre de cuándo poder equipar, mientras se pierden de esos momentos especiales en el hogar.
El testimonio de Jaime Crespo también era de decepción, porque siendo rapidito le cuesta surtir de la subsidiada y tuvo que recurrir a la premium, que también presentaba dificultad.