Alexandra Peña Burgo | LA PRENSA.- “No estamos paseando, estamos protestando”, se escuchaba al unísono, consigna que estaba acompañada del sonido de los cauchos por el pedaleo de 150 ciclistas al rodar sobre el asfalto de las principales calles y avenidas de Barquisimeto en la “Ciclo-Protesta” que se realizó ayer desde las 7:00 de la mañana.
La protesta se inició en la entrada de Barquisimeto justo en el Parque El Cardenalito, ahí fue el punto de encuentro de los distintos grupos de ciclistas que hacen vida en la ciudad. Banderas de Venezuela, sus cascos bien puestos y una buena hidratación fueron las armas que mostraron los deportistas larenses que quisieron alzar la voz con su pedaleo.
El grupo de ciclistas empezó el recorrido por la avenida Los Leones, el pelotón lo comandaba Carlos Carrillo, quien llevaba un documento en mano para ser entregado a distintos organismos de seguridad, al gobierno estatal y el municipal.
Pasaron por la avenida Lara, la avenida 20, la calle 42 y avenida Venezuela.
“La idea de esta actividad es hacer un llamado de atención a las autoridades con el objeto de que nuestro derecho como ciudadanos se haga respetar”, soltó Carlos Carrillo.
El primer documento lo entregaron en la Comandancia General de la Policía del estado Lara, el grupo fue recibido por el subdirector de Polilara, Argenis Montero.
“Tenemos nuestro personal en la calle, estamos desplegados desde las 4:00 de la mañana”, contestó ante la solicitud de los pedalistas.
El recorrido continuó por la avenida Morán, en donde entregaron el documento en el Destacamento 121 de la Guardia Nacional Bolivariana, que en uno de sus fragmentos reza: “El vandalismo no es mi agenda, amigo funcionario te pido me protejas, usa el arma que te di para que no le pase nada a mi familia y mis bienes..”.
La protesta ciclística continuó hasta la sede de la Policía Municipal, ubicada en la avenida Bicentenario, siguieron por Los Leones y entregaron el documento en la Decimocuarta Brigada de Infantería Mecanizada y llegaron hasta el Cardenalito para finalizar la protesta pacífica.