Euseglimar Gónzales | LA PRENSA.- Ayer en la mañana, más de ocho miembros de las cooperativas Los Compatriotas y Marmoleros señalaron a José Gregorio Mendoza, director del Cementerio Municipal, como el responsable de la profanación de tumbas.
Según los miembros de las cooperativas, los trabajadores de la Alcaldía de Iribarren, adscritos al cementerio sacan las placas de cemento de los panteones para venderlas a otras familias que necesiten de ellas para sepultar a su familiar,
Contaron que seis placas nuevas salen en 25 mil bolívares, mientras que los trabajadores las ofrecen en 12 mil bolívares.
Alcira Piña se llevó una sorpresa el primero de noviembre cuando fue a visitar la tumba de su esposo y la encontró sin la placa de cemento. Ayer la administración le respondió y le mandó a colocar una placa vieja de mármol.
“Mi esposo murió en febrero de este año y le mandé a hacer un trabajo a la tumba y el martes me llevé la sorpresa de que se habían robado las placas”, soltó Piña, quien pidió que haya más seguridad.