Anaís Mendoza | LA PRENSA.- Comerciantes asiáticos no salen de una. Más de 20 ladrones ingresaron la noche del domingo a uno de los sietes establecimientos que resultó quemado en el incendio registrado la tarde del 30 de diciembre.
El grupo hamponil incendió ayer a las 6:00 de la mañana el local Comercial 323, con el resto de los materiales calcinados, generando un pequeño incendio, el cual tuvo que ser sofocado por los Bomberos de Iribarren. La dueña del establecimiento narró que los delincuentes hicieron eso en venganza. Ella explica que los dueños de los locales habían denunciado con la Policía a los hampones por meterse a robar la poca mercancía que quedaba de los negocios.
Detalla la comerciante que los ladrones ingresaron el domingo a las 10:00 de la noche con la intención de robar. Pero como ellos que están rondando sus negocios día y noche se percataron que los malandros estaban dentro. “Eran muchos, más de 20 los que estaban buscando qué robar entre los escombros, por eso llamamos a la Policía”, explica la comerciante.
De inmediato, los dueños de los locales llamaron a una comisión de la Policía Nacional Bolivariana. Cuando los funcionarios llegaron los encontraron robando, y por eso se los llevaron detenidos. Pero la muchacha indicó a este medio que los PNB soltaron la madrugada de ayer a los malandros y en represalia se fueron a las 6:00 de la mañana a meterle candela al local.
Lo incendiaron, con el mismo material que está carbonizado en el negocio, luego del acto delictivo huyeron del lugar. “Sólo fueron una llamitas leves, pero nos asustamos y por eso llamamos a los bomberos”, concluye la mujer.
La comisión de Bomberos de Iribarren acudió al negocio a bordo de una unidad y sofocaron las llamas.
Un grupo de personas estaba dentro del establecimiento limpiando el resto de los escombros, mientras que los comerciantes montaban la mercancía en un camión para evitar que los malandros vuelvan a ir y se lleven lo que queda.
Foto: Eduard Martínez.