Guiomar López | LA PRENSA DE LARA.- Discutir sobre el cese de las enfermedades cardiovasculares empieza por insistir en la prevención con cambios de hábitos para evitar que el principal agente de riesgo de adultos jóvenes sea la hipertensión arterial, que tiene prevalencia de 30 a 36% a partir de los 40 años, según estimaciones de la Sociedad Venezolana de Cardiología (SVC). Además que se complica por fallas en el tratamiento, lo que preocupa a especialistas porque se trata de la asesina silenciosa que daña principalmente el corazón, cerebro y riñones.
Son alarmas encendidas en el más reciente informe de septiembre de 2023 de la Organización Mundial de la Salud (OMS) acerca de la hipertensión arterial, en el que realiza el llamado a los gobernantes a garantizar la atención primaria, considerando que los países menos desarrollados terminan siendo los más afectados por la falta de programas preventivos permanentes en la red primaria de atención.
Las cifras hablan del peligro que corren 4 de cada 5 pacientes sin cumplir con el adecuado tratamiento y deja graves daños a nivel cardiovascular. Un abismo al que se está más propenso a caer al sufrir accidentes cerebrovasculares, infartos de miocardio, insuficiencia cardíaca y daños renales. De allí, las recomendaciones apuntan a una mayor accesibilidad al tratamiento para evitar el promedio estimado de 76 millones de muertes desde 2023 hasta 2050. Unas proyecciones sobre la mayoría de víctimas por accidentes cerebrovasculares.
Heliodoro Rodríguez, presidente de la SVC, dijo que no tienen cifras oficiales, pero que manejan un promedio de prevalencia que va de 30 a 36% de hipertensión arterial más temprana. Se trata de pacientes cada vez más jóvenes y a partir de los 40 años de edad, cuando generalmente siempre estuvo vinculada a los adultos mayores.
Un motivo suficiente para que la sociedad insista con la prevención en las comunidades para hacer esfuerzos por mejorar la alimentación, empezando por controlar la sal y entendiendo que no puede superar, en promedio, de 5 gramos diarios. Tratar de incluir frutas y legumbres, además de evitar el abuso con grasas y azúcares refinados. Además de cumplir una rutina de actividad física porque el sedentarismo es otro factor de riesgo, así como el tabaquismo de cualquier índole.
«Pero lo más importante es cumplir con el control de la tensión arterial porque se tienen casos asintomáticos y está afectando a la población más joven», señala Rodríguez, de la necesidad del control periódico. También lamenta que la situación país deja contra la pared a estos pacientes que pueden tener calidad de vida, pero con el debido control. Venezuela superó la escasez de medicamentos de 2015, pero pierde la capacidad de poder adquirirlo y cumplirlo a cabalidad, y lo más importante es respetar el cumplimiento del tratamiento.
Habla del cuidado permanente para frenar el avance agresivo a los órganos blandos, empezando por el corazón que eleva la presión y puede sufrir un infarto, incluso por obstrucción arterial. El cerebro es vulnerable a accidentes cerebrovasculares, trombosis por obstrucción y hemorragia. No hay que olvidar los riñones, la presión arterial elevada puede causar insuficiencia renal que necesite diálisis.
Hacer esfuerzos
Para el cardiólogo, Marcial Amaro, es indispensable cumplir la posología al pie de la letra porque pueden aumentarse la dosis o complementarse con otro medicamento, de acuerdo con la indicación médica por la evaluación constante. «Se deben hacer esfuerzos porque tenemos deficiencias de atención primaria sin campañas informativas ni la capacidad de destinar un presupuesto para la salud«, señala de una enfermedad crónica, que al detectarse en la fase inicial de hipertensión leve puede frenarse con el control de la dieta y estilo de vida. Pero cuando su estadio es severo exige hasta el suministro de cuatro medicamentos y mayores gastos por los daños colaterales.
Lamenta que las limitaciones económicas influyan en la falta de apego a las consultas regulares y sin la debida supervisión no existirá el control. Un ejercicio de conciencia para hacer entender que el descuido puede conducir a la muerte, por subestimar el daño al corazón.
Esa advertencia también es realizada por Omar Álvarez, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Lara, quien confirma la existencia de los medicamentos y dice que los pacientes deben hacer el sacrificio para adquirirlos. Muchas veces llegan a las farmacias preguntando los precios y optan por llevar los más económicos, de acuerdo con la disponibilidad del bolsillo. Lo importante es que los medicamentos cumplan con su registro sanitario y el paciente no cometa el error de alterar las dosis, cuando se administra incompleto o intermitente a querer extender la duración del tratamiento.
Otro aspecto importante lo menciona el psicólogo, Jesús Goyoneche, ante la importancia de la estabilidad emocional porque los riesgos de la ansiedad, ira y estrés desencadenan la alteración de la presión arterial con síntomas como sudoración, dolor de cabeza, mareos y la sensación agitada que suele generar riesgos cardiovasculares.
Esto conlleva al nivel de conciencia para buscar grupos de apoyo y hasta la asesoría psicológica. El corazón exige control y tranquilidad.