LA PRENSA de Lara | Agencias-.& ;Cada día es más grave la situación de asistencia de salud para los venezolanos. A los problemas de escasez de medicamentos, insumos e imposibilidad de traslado, se suma la renuncia masiva en casi todos los centros de salud pública del país. En el Hospital Central de San Cristóbal, estado Táchira, de siete mil 200 trabajadores que estaban en nómina en el año 2011, sólo quedan mil 100.
Melquiades Delgado, secretario general del sindicato de los trabajadores de la salud, dijo que la situación cada día es más aguda, muchos trabajadores renuncian a diario para emigrar, porque en Venezuela no pueden vivir con un salario de 40.000 bolívares al mes, que recientemente fue elevado a 150.000, sin embargo aun esta cifra no les permiten adquirir la mitad de la canasta básica alimentaria.& ;
Delgado sostiene que los trabajadores que quedan en el centro de salud no tienen capacidad para atender los 10 pisos que comprende el hospital más importante del Táchira. «En el piso 10, por ejemplo, solo hay una enfermera, en la noche, para unos 30 pacientes y no cuentan con una camarera para poder asear el área», aseguró Delgado.
El trabajador del hospital central denunció que el personal no tiene cómo llegar hasta el centro de salud, porque pasan hasta tres días en una cola para surtir de combustible, tampoco pueden pagar un pasaje porque no hay transporte público y están asistiendo a sus labores con los zapatos rotos, los uniformes en andrajos y casi sin comer.
«Están débiles, desnutridos, porque lo único que pueden comer por ahí algunas veces es un pancito o una arepa». Delgado asegura que muchas de las intervenciones quirúrgicas no se dan porque los trabajadores no llegan, «pero no es porque no quieren, sino porque no tienen cómo pagar un pasaje, no tienen zapatos y no tienen ropa para ir a trabajar».
El sindicalista resaltó el que Venezuela es el único país del mundo donde el trabajador debe «pagar para trabajar», al decir que el gobierno nacional eliminó los beneficios, las pensiones y los salarios ajustados a la realidad.
Además indicó que particularmente en el Hospital de San Cristóbal los servicios se siguen cerrando, «Lamentablemente con el cierre de servicios, el que sigue pagando los platos rotos es el paciente, que se enferma más por la situación que se vive en el país «.
Fuente: Caraota Digital