AFP | La Prensa-. La canciller Delcy Rodríguez arribó este lunes a una reunión de cancilleres y vicecancilleres del Mercosur en Montevideo en la que se resolverá sobre el traspaso de la presidencia del bloque a Caracas, y criticó a «la derecha» del bloque.
Vengo «con muy buenas expectativas», dijo Rodríguez a periodistas al ingresar al edificio de la cancillería uruguaya para un encuentro que no fue anunciado oficialmente por el país anfitrión.
«Como establecen los protocolos, se recibe automáticamente la presidencia de este órgano subregional», añadió sobre la postura de su país, que ingresó al Mercosur en 2012, con Paraguay -que no había aprobado su ingreso- suspendido del grupo.
Consultada sobre la postura de Brasil, que quiere posponer hasta agosto la discusión sobre el traspaso de la presidencia al gobierno de Nicolás Maduro, la canciller venezolana respondió: «No hay que atender a los malos modales de la derecha. Hay que atenerse a las normas».
Brasil y Paraguay se oponen férreamente a que Venezuela asuma el comando de la agenda del bloque que completa Argentina, en razón de la situación política que atraviesa el país caribeño, sumido en una crisis entre gobierno y oposición.
El canciller brasileño, José Serra, expresó «preocupación» por Venezuela la semana pasada en Montevideo, durante una visita en la que formuló la propuesta de posponer el debate hasta agosto a su par uruguayo Rodolfo Nin Novoa.
El presidente argentino Mauricio Macri ha sido por su parte fuertemente crítico de Caracas y dejó entrever la posibilidad de que su país asuma el puesto rotativo en los próximos meses, en declaraciones en Europa la semana pasada.
Aunque Uruguay, que ejerce la presidencia rotativa del bloque ha señalado y reiterado que quiere traspasarla a Caracas como indica la normativa del Mercosur, participantes del encuentro en Montevideo aseguraron a la AFP que la moción de Brasil se encamina a ser aprobada.
La canciller venezolana fue la única en realizar declaraciones antes de la reunión. Participarán además en la cita los cancilleres de Uruguay, Nin Novoa, y Paraguay, Eladio Loizaga, y los vicecancilleres de Argentina y Brasil.