EFE | LA PRENSA DE LARA.- Nicaragua calificó este martes de «barbarie» la extradición a Estados Unidos del empresario colombo-venezolano Alex Saab, presunto testaferro del presidente Nicolás Maduro, aliado del mandatario nicaragüense, Daniel Ortega.
«Querido compañero Nicolás Maduro, presidente constitucional, nuestra solidaridad frente a la barbarie y desconocimiento del derecho internacional» por parte de Washington, dijo la vicepresidenta nicaragüense, Rosario Murillo, a través de medios oficiales.
Murillo, esposa del presidente Ortega, afirmó que «nunca nos vamos a acostumbrar a eso, que no crean los imperialistas de la tierra que porque todos los días violan el derecho internacional, los pueblos nos vamos a acostumbrar».
«No. Luchamos y vamos a vencer. Nuestra solidaridad con los hermanos venezolanos», añadió.
Saab, de 49 años, fue extraditado desde Cabo Verde (África) el sábado pasado y el lunes tuvo su primera audiencia por lavado de dinero en una corte de EE.UU., donde es acusado de siete cargos de lavado de dinero y uno de conspiración para cometer ese delito.
La primera dama nicaragüense se solidarizó con las autoridades venezolanas por lo que calificó de «secuestro».
«Nuestra solidaridad con los hermanos venezolanos, con Nicolás, con todos los compañeros de la dirección del Gobierno, del partido, frente al secuestro del hermano venezolano Alex Saab, secuestro violentando todas las normas del derecho internacional», sostuvo.
«Por eso decimos, ellos creen, ellos, los imperialistas de la tierra, los yanquis enemigos de la humanidad, creen que vamos a acostumbrar, nunca nos acostumbraremos, siempre lucharemos, y además venceremos (…) estamos unidos en batallas y en victorias», añadió.
Nicaragua y Venezuela forman parte de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), que fue fundada el 14 de diciembre de 2004, y que además integran Cuba, Venezuela, Bolivia, Nicaragua, Antigua y Barbuda, Dominica, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Granada y San Cristóbal y Nieves.