Agencias | LA PRENSA DE LARA.- El Gobierno de Ecuador y los movimientos indígenas se reunirán el próximo jueves, en Quito, para definir la hoja de ruta de los diálogos, tras el acuerdo alcanzado la semana pasada, que puso fin a las protestas antigubernamentales por la carestía de la vida.
Así lo confirmó este martes la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE) en un comunicado, en el que puntualizó que en la cita del jueves se determinará la metodología de trabajo, se establecerán los temas a tratar y se definirá una hoja de ruta con los pasos a seguir durante los 90 días establecidos en el acuerdo.
La reunión se realizará en la sede de la CEE, el 7 de julio, a las 09.00 hora local (14.00 GMT), precisa la Conferencia en el escrito.
«Confiamos que este proceso de diálogo, discernimiento y toma de decisiones nos ayude a construir juntos un Ecuador de fraternidad, justicia, equidad», finaliza el comunicado suscrito por la Secretaría General de la CEE.
Un día después del 30 de junio, cuando se firmó el «Acta por la paz» que permitió terminar con dieciocho días consecutivos de movilizaciones, el Ejecutivo del presidente Guillermo Lasso comenzó a poner en práctica lo acordado.
Las primeras acciones de Lasso han fueron concretar el pasado viernes los dos puntos centrales del acuerdo, que son la reducción de los combustibles subsidiados y la derogatoria del decreto que promovía la actividad petrolera.
Así, el mandatario conservador de Ecuador redujo en 15 centavos de dólar el precio congelado de las gasolinas de 85 octanos y del diésel, de manera que ahora pasarán a costar 2,40 y 1,75 dólares, respectivamente, por galón (3,78 litros).
Las organizaciones indígenas y campesinas que promovieron las protestas aceptaron finalmente esta rebaja pese a que su demanda era desde un inicio que se rebajasen a 2,10 y 1,50 dólares, respectivamente, precios que tenían estos combustibles un añ;o atrás.
Lasso también cumplió el viernes con derogar el decreto 95 que promovía la actividad petrolera, una de las principales exigencias del movimiento indígena.
Otra de las demandas neurálgicas de indígenas y campesinos era la derogatoria del decreto 151 sobre minería, pero aceptaron que el Gobierno se comprometa a reformarlo para que no haya más concesiones mineras en reservas naturales, territorios indígenas, zonas arqueológicas y territorios ancestrales de pueblo indígenas.
EFE