AFP | LA PRENSA.- Seis miembros de la Cruz Roja fueron asesinados a balazos en el norte de Afganistán, donde distribuían ayuda, y otros dos están desaparecidos, anunció este miércoles la organización internacional.
Los integrantes de la organización fueron asesinados en la inestable zona de Jawzjan, informó el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), sin revelar la nacionalidad de las víctimas ni la identidad del grupo que podría estar detrás del incidente.
«Podemos confirmar que seis de nuestros colegas murieron y dos siguen desaparecidos en la provincia de Jawzjan», indicó un portavoz del CICR a la AFP.
«Estamos conmocionados y devastados», lamentó.
Los empleados humanitarios viajaban en un convoy para distribuir ayuda a los poblados, sepultados por intensas nevadas que habían caído en la zona, cuando sus vehículos fueron tiroteados.
Estas muertes ocurren pocas semanas después de la liberación de un trabajador español del CICR que fue secuestrado el 19 de diciembre, cuando se trasladaba con un equipo de la organización entre Mazar-i-Sharif y la provincia vecina de Kunduz, bastión talibán.
Fue liberado a mediados de enero, pero ni el CICR ni los responsables locales precisaron cómo fue puesto en libertad ni de quién se sospecha que lo había secuestrado.
Ningún grupo armado reclamó la autoría del atentado, pero el jefe de policía de Jowjan, Rahmatullah Turkistani, acusó a miembros del grupo Estado Islámico.
Turkistani explicó que los cadáveres de las seis personas fueron trasladados a un hospital provincial.
Los talibanes, el mayor grupo militante en Afganistán, aseguraron que no eran responsables del ataque.