Lorena Rojas | LA PRENSA DE LARA.- La maleza, los gusanos, la fetidez y las enfermedades respiratorias se han vuelto parte del día a día de los barquisimetanos porque las tuberías de aguas servidas han colapsado en diversos lugares, haciendo que las calles luzcan con ríos de cloacas, una muestra de la falta de inversión y respuesta de parte de Hidrolara.
Ante el despacho de Hidrolara han llegado denuncias para que reparen las cloacas en sectores como Barrio Unión, La Ruezga norte, adyacencias a Las Trinitarias, San Jacinto, entre otros, pero estos reportes al parecer quedan engavetados y se unen a la interminable fila de solicitudes en las que pasan incluso añ;os esperando por una solución.
Fanny Flores, asegura que la empresa hidrológica perdió credibilidad, puesto a que tienen un bote de aguas negras desde hace al menos 3 añ;os el cual ha sido «reparado» en varias oportunidades, pero como no se reemplazan las tuberías, se ha vuelto un dolor de cabeza, porque es más lo que tardan esperando para que hagan la reparación que lo que tarda en volverse a dañ;ar.
«No aguantamos esta situación, hemos tenido que cambiar nuestras rutinas porque el olor que se impregna en las calles es terrible, en mi caso tengo que dormir con el ventilador en la cara para evitar el mal olor, pero esto me trae consecuencias en la respiración, porque sufro de asma», dijo Flores, quien tiene un colapso de cloacas frente a su vivienda en la avenida 1 con calle 6 de la Ruezga Norte, sector II.
En una situación similar se encuentran los habitantes de Barrio Unión, donde se reportan cuatro colapsos de aguas servidas los cuales tienen al menos dos añ;os y donde uno es más grave que otro.
En la carrera 1 con calle 17, no solo es la maleza la que muestra la falta de respuesta de la empresa, sino el problema de salubridad que está causando, porque a los vecinos por los grifos les está saliendo el agua potable mezclada con heces.
«Realmente es una situación que no aguantamos, Hidrolara vino a reparar hace tiempo, después que luchamos y esperamos tanto para que lo hicieran, ahora se volvió a colapsar pero nos sale el agua negra hasta por las plumas, así no la podemos usar porque está contaminada», dijo María Valles, quien es una de las más afectadas.
Otro de los colapsos en ese mismo sector se encuentra en la carrera 4 entre calles 12 y 13, donde los habitantes aseguran que ante la falta de respuesta tuvieron que pagarles a unas personas para que hiciera un «camino» para que el agua cayera a una alcantarilla y no se esparciera en toda la calle.
