Ana Uzcátegui | LA PRENSA de Lara.- Lo que se proyectaba como el mercado más grande de Venezuela en 1983 y de donde salían más del 60% de las hortalizas que consumía la población, hoy ha quedado reducido a la anarquía. El Mercado Mayorista de Barquisimeto (Mercabar) ha venido en decadencia en los últimos cinco años, según cuentan comerciantes fundadores.
La inseguridad, falta de servicios como el agua y electricidad y las confrontaciones entre locatarios y el presidente Juan Carlos Sierra, por aplicar incrementos inconsultos del canon de arrendamiento e intentos de desalojo ha hecho que más de 100 comerciantes hayan abandonado el lugar de 332 que existían.
«Esto no es ni la sombra de lo que era hace 36 años», rememoró Arcenio Ramírez, fundador de Mercabar, quien provenía del antiguo mercado El Manteco y para la época pudo adquirir nueve locales en el área verde, ahora sólo mantiene uno. «La venta de víveres por ser productos de primera necesidad ha disminuido en más de un 80%. Los robos y la extorsión nos tienen en la ruina», comentó. Aseguró que a pesar que el Mayorista es custodiado por militares en su entrada, no se ocupan de la inseguridad interna, y que ha sido apuntado con pistola por delincuentes que rondan la zona
«Antisociales pretendían quitarme Bs. 300 mil mensuales a cambio de permanecer en el lugar. Hay locales que han sido robados más de 5 veces en lo que va de año», relató. Mencionó que a esto se le suma el acoso del que son víctimas desde el 14 de junio, cuando un grupo de 171 comerciantes fue amenazado con desalojos por la actual administración.
«Hay un hostigamiento constante. Muchos han sido víctimas de confiscación de mercancía, por eso es que ya los domingos no hay mucho movimiento en Mercabar. Los empresarios temen que en su ausencia sus locales sean intervenidos. Prefieren cerrar y recibir mercancía un día a la semana, los jueves», indicó Édgar Colagiacomo, abogado de comerciantes afectados.
Especificó que los empresarios cancelan por tribunales el arrendamiento y que a pesar de la solicitud de amparo de protección que introdujeron, todavía no han tenido una respuesta jurídica.
Sólo promesas
El historiador Juan Molina, indicó que parte del colapso que presenta Mercabar se debe a que el proyecto no fue terminado. Durante el gobierno de Luis Herrera Campins, detalla, el mercado se proyectaba como referencia de comercialización de Latinoamérica. Iba a tener un hotel para que pernoctaran más de 600 personas que del interior del país llegaban a comprar o vender. En las promesas quedó la construcción de una gasolinera, un tanque para abastecer de agua potable a todo el mercado y una estación de tren donde iban a descargar productos directos de Puerto Cabello.
«Ha faltado voluntad política para terminar Mercabar. Hoy hay sitios insalubres como La Playa donde se comercializan productos las 24 horas sin control. Basta ver el estado de los baños. Se dejaron de hacer inversiones y se dejó de adecuar el lugar a las nuevas tecnología», mencionó.
Raúl Infante, secretario del Sindicato de Mercabar, contó que la crisis en los servicios públicos y la inseguridad en el mayorista ha hecho que la economía informal se dispare. «Hay una merma de comercialización y nos preocupa que aparezcan mercados paralelos como El Manteco y el Rodeo vía Quíbor», dijo. Comentó que para evitar ser víctimas de robos en La Playa, camioneros prefieren vender sus productos en estos mercados informales que han proliferado en Iribarren.