Guiomar López | LA PRENSA DE LARA.- Este largo período de lluvias incrementa la preocupación de productores de municipios foráneos que deben ingeniárselas para sacar sus cosechas y los habitantes que terminan incomunicados por tramos críticos en vialidad, señ;alan que derrumbes y falta de canalización de cauces empeoran las deterioradas vías de penetración agrícola. La desesperación los obliga a intentar resolver, colaborando para alquilar maquinaria y demás gastos que permitan despejar la carretera ante la falta de intervención gubernamental.
Antonio García, caficultor de Andrés Eloy Blanco, expresa que algunos ha tenido que pasar el café en burros o caballos en el tramo de Los Palmares, en Sanare. Se trata de un sector incomunicado por derrumbes. Así mismo tienen que hacer para llevar el café desde Mata Palo hasta Tierra Buena, vía con más de 10 añ;os de abandono. Planean alquilar por 15 horas maquinaria, además de colaborar con combustible y comida. Sólo conocen de la intervención de la alcaldía desde Barro Negro hasta Sabana Redonda.
Señ;ala García que los productores colaboran con café para comprar combustible, aceite y reunir los $150 que deben disponer para alquilar un tractor de oruga hacia el sector de Caspo. Mientras, casi 200 habitantes pueden organizarse en «convites» con pico, escardillas y palas para la mano de obra. Lamenta casos tan graves como el café de la parroquia Yacambú, que es vendido en Portuguesa y no en Lara por la cercanía y mejor vialidad.
Para Luis Carrasco, de Villanueva de Morán, se repetirá la hazañ;a de productores que en julio de 2022 arreglaron un kilómetro en el sector Marilonza, que era intransitable porque los carros terminaban «patinando» en el barro. Fueron nueve horas de retroexcavadora en $90 y un volteo de arena que sólo exigió el gasoil.
Otros pasos peligrosos como La Travesía y Santo Domingo con lluvias que dejan zanjones en la carretera, para lo que necesitan tener de 25 a $50 para pagar al operador de la maquinaria.
En Urdaneta, Manuel Torres reclama que la entrada a Siquisique colapsa por falta de canalización de más de 20 quebradas y eso también afecta el acceso al caserío Cauderales. Están en riesgo cosechas de melón, cebolla, tomate y pimentón. Reconoce que al alcaldía realiza el intento, pero sólo cuenta con una máquina y una cuadrilla, sin mayor alcance para el resto del municipio.
El panorama no es diferente en Torres, donde Fernando Alejo precisa que en sectores como Palmarito ha tenido que pasar los animales por guayas, improvisando una especie de teleférico. Y en el sector Las Cocuizas colapsó la alcantarilla y el cauce prácticamente acabó