Osman Rojas D | LA PRENSA de Lara.- La enfermería es una profesión de esclavitud. De acuerdo a lo denunciado por las profesionales ejercer la carrera en estos momentos en Venezuela es aceptar un rol de explotación continua, pues el déficit de personal que hay en los centros públicos condena a las enfermeras a trabajar más de la cuenta.
«Por lo general las enfermeras tienen un radar de tres o cuatro pacientes por servicio, pero con la falta de personal estamos atendiendo a ocho o diez enfermos por área. Hay noches en las que no nos sentamos ni cinco minutos porque tenemos que estar cubriendo distintas zonas», comentan enfermeras del Seguro Social.
Tan delicada es la situación con estas profesionales que, de acuerdo a lo dicho por representantes del Colegio de Enfermeras en el estado Lara, hay servicios que en guardias tienen a dos o tres licenciadas cuando lo regular es que tengan ocho o diez.
«Nuestras enfermeras son explotadas. Cada vez hay menos trabajadoras disponibles porque el salario es muy bajo. Muchas prefieren irse y dejar solo los hospitales», comenta preocupada la licenciada Elda Jiménez, presidenta del Colegio de Enfermeras en el estado.
Aunque no hay una cifra oficial de cuántas enfermeras están trabajando en los centros públicos, se estima que menos del 50% de las colegiadas ejercen, pues de las 15 mil profesionales inscritas se calcula que sólo unas 6 mil trabajan en la red pública.
«Con lo que ganan las enfermeras no les alcanza para comer. Cada vez hay más problemas en los hospitales y es evidente que con profesionales cobrando sueldo mínimo no se llegará lejos», dice Jiménez.