José Miguel Najul | LA PRENSA.- La marcha del 23 de enero fue la muestra de una debilidad en la coalición opositora, y ésta tiene un origen multifactorial. La dirigencia, la situación económica y la disposición de la sociedad se han alineado inversamente para la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que puede recuperarse, afinando con certeza los factores adecuados.
Julio Lima, politólogo especialista en estrategias electorales, asegura que la génesis de la “crisis de convocatoria se origina en los conflictos de la dirigencia”. “Los líderes de la oposición se han destacado por no comportarse como tal. El pueblo venezolano no los ve como una opción viable, con una propuesta concreta, sino como un grupo de personas que aparecen en búsqueda de poder”, expresa Lima.
La falta de homogeneidad, no en las posturas, sino en la estrategia política, es lo que el especialista considera como una falla fundamental.
“Los dirigentes, al ser interrogados por las diferencias en la MUD, responden como autómatas que se debe a la pluralidad. Y eso es comprensible. Pero esa ceguera selectiva impide que haya un espacio de reflexión para detectar el hecho más importante: que un grupo puede ser diverso internamente, pero debe trazar una sola línea de acción, cosa que ellos no han logrado”, critica.
Marcos Moreno, experto en el área de marketing político, apunta hacia el desgaste de la energía social de los venezolanos. “La masa opositora fue convocada, sistemáticamente, a movilizaciones infructíferas el año pasado. La ausencia de resultados ha sembrado un escepticismo natural en la gente, que desconfía de su propia dirigencia. Es como el cuento de Pedrito y el lobo: a fuerza de desilusiones, la gente termina por no creer”, afirma el politólogo.
Sin embargo, no cree que sea el fin de la oposición. El hecho de que hayan anunciado un relanzamiento es, para Moreno, una buena señal.
“Pudiera parecer algo superfluo, pero si de verdad la oposición está dispuesta a incorporar activamente a la sociedad civil, a sectores con intereses más allá del poder, su visión podría afinarse y ser controlada por estos actores”, dice.