Osman Rojas | LA PRENSA.- Cada 48 horas un niño con cáncer muere en el estado. La escasez de quimioterapias en el país y las condiciones hospitalarias con la que deben lidiar estos pacientes ha disparado la cifra de mortalidad oncológica infantil en la región.
René Rivas, presidente del Colegio de Médicos en Lara, asegura que en los últimos dos meses han muerto en la entidad 28 niños con cáncer.Lo que pasa con la salud en Venezuela es realmente grave. Como gremio nosotros lamentamos profundamente lo que pasa con los enfermos oncológicos en especial si son niños que no tienen conciencia de lo que está pasando. Es inhumano exponer a los infantes a es
tas condiciones”, soltó Rivas.
El dirigente gremial lamenta la decadencia que vienen experimentando los Seguros Sociales en el país y calificó de “irresponsable” a las autoridades sanitarias regionales y nacionales.
“Esto es un genocidio pasivo. En Venezuela vivimos en una etapa de supervivencia en la que toca improvisar para mantenernos. No es posible que los Seguros Sociales, instituciones que deben garantizar la distribución de insumos, tengan siete meses sin recibir tratamientos quimioterápicos para niños. Esto es una falta de respeto”, sostuvo.Diana Rodríguez, madre de una niña oncológica de apenas 9 años, ha experimentado en carne propia los embates de la escasez.
Su hija fue diagnosticada con leucemia en agosto de 2016 y desde entonces empezó una serie de quimioterapias que se vio interrumpida en enero de este año.
“Cada vez que voy al Seguro Social me ponen una excusa distinta. Yo no recibo tratamiento por parte del Gobierno nacional desde octubre
del año pasado y eso hay que denunciarlo”, comenta Rodríguez.La madre se aferra a Dios en sus oraciones para que su hija salga con
bien y confiesa que esta emana su pequeña recibirá tratamiento vencido porque es lo único que ha conseguido.
“Me donaron eso y el hematólogo me dijo que hay que ponerle algo aunque haya caducado”, dijo.En el Hospital Pediátrico hay 22 niños con cáncer que deben recibir quimioterapias en los próximos días. De los 22 pacientes sólo cuatro tiene el tratamiento mientras los demás están a la espera.
La Prensa intentó hablar con las autoridades sanitarias en la región para que explicaran esta situación, pero ninguna respondió el teléfo
no.