Pasar a pie o en vehículo automotor por la calle 29, entre las carreras 24 y 25 de Barquisimeto, se ha convertido en una odisea. Los desbordes de aguas negras y blancas que hay desde hace unos tres años han deteriorado el asfalto y ocasionado huecos que toman desprevenidos a conductores, algunos optan por subirse a la acera para esquivarlos.
«El agua salpica cuando los carros caen en los huecos y esa agua sucia salta dentro de los negocios y casas», así lo expresó Lumar Alvarado, quien además de padecer por el mal olor del agua estancada, sufre por no recibir el servicio por tubería, porque un tubo de la calle se rompió y el líquido se pierde en la vía.
Carlos Oviedo, integrante del Consejo Comunal El Centro, explica que este problema fue planteado por la comuna Bolívar de El Centro, en la primera consulta popular que se realizó y el proyecto para su solución salió electo, pero hasta ahora no han comenzado los trabajos. Hidrolara ya hizo la marcación para levantar el asfalto y reparar las tuberías. La calzada en esta cuadra ya no sirve y en otras áreas de la calle se está agrietando.
En la zona hay negocios de comida y les afecta mucho, las personas siguen de largo y no consumen porque si no es por el mal olor es por el riesgo de que el agua sucia les llegue. Ya ni una barrera de bloques y piedras frena el agua sucia. Junior Romero, comerciante, espera que pronto reparen los botes de agua.