El Guaro Mirón | LA PRENSA.- Recuerdo que cuando estaba chamo siempre merendaba por las tardes un delicioso helado de coco que vendía la Sra. Margarita, una viejita que vivía al final de mi calle. Ansioso por volver atrás en el tiempo, invite a mi pana Ángel a comprarnos unos helados para sobrellevar el calorón que está haciendo en estos días, sin embargo mi sorpresa fue mayor cuando comprobé que las ventas de helados caseros va por el suelo.
Luego de dar muchas vueltas logre conseguir un negocio, resulta que era la casa de mi amigo Ronald Romero quien tiene más de cinco años vendiendo helados de fruta y me contó que en lo que va de año ha tenido que aumentar tres veces por la inflación. Cuando comenzó a venderlos costaban 5 bolívares, hoy los ofrece en 150 y próximamente tendrá que aumentarlos porque no le da la base.
Antes existía variedad de sabores porque preparaba helados de parchita, tamarindo y coco que se vendían como arroz picado, pero debido a la escasez de azúcar y leche opto por preparar de otras frutas como guanábana, piña y fresa.
Los helados de galleta también se quedaron varados porque un solo paquete de galleta María sale en 150 bolívares y ya no resulta. Sumado a los altos precios que se consigue la leche, azúcar y ciertas frutas, los vendedores también se la han visto negras con el aumento de los vasos plásticos que ya ronda los 500 bolívares cada paquete, dependiendo de la cantidad y el tamaño.
Cuando antes había proliferación de casas que vendían helados frutales en vasito, ahora se cuentan con una mano y estoy seguro que sobran dedos. A raíz de esta caída, muchos continúan tratándose de rebuscarse el día a día y optaron por vender otros productos más fáciles de conseguir como la masa de maíz, panes, huevos y hasta queso.