Agencias | LA PRENSA DE LARA.- El Monseñor Aldo Giordano se ha despedido este miércoles de Venezuela tras servir durante siete años como representante del Vaticano en el país, al ser transferido por el papa Francisco como nuevo nuncio apostólico ante la Unión Europea (UE).
«He tenido la suerte de despedirme de Venezuela con la beatificación del José Gregorio Hernández, quedan en mi corazón», expresó Giordano durante un acto de reconocimiento a su labor, realizado por el presidente Nicolás Maduro.
Sin embargo, el reconocimiento otorgado por el jefe de Estado venezolano fue rechazado por el Monseñor al recordar que, en su labor como embajador vaticano en el país, solo se enfocó en «servir a la paz, la reconciliación y al diálogo».
«Yo he pedido en nombre del papa renunciar a esta condecoración porque el papa Francisco nos dice: en un país, ustedes, mis representantes deben ir a servir, a ayudar, y no a buscar algo de honor», señaló Giordano tras agradecer a Maduro su atención durante su estancia en Venezuela.
Por su parte, Maduro calificó al Monseñor Giordano como «un hombre de palabra, respeto y gran representante del papa Francisco» en Venezuela. Además, recordó el momento en que el prelado arribó al país en 2014, mismo momento cuando se instalaba la «Conferencia Nacional por la Paz y Convivencia».
«Los pasos que dábamos en el camino del diálogo, en 2014, una parte de la oposición se había ido a las calles. La Salida, uno de los planes para derrocar al gobierno y nosotros nos plantamos con el llamado permanente al diálogo», expresó Maduro.
A principios de mayo, el papa Francisco nombró al Monseñor Aldo Giordano como nuncio apostólico ante la Unión Europea (UE), informó en ese momento la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV).
La conferencia episcopal recordó en su comunicado que Giordano brindó «gran atención a diversos aspectos importantes para la Iglesia en Venezuela», entre los que destacó «la promoción de la misión evangelizadora».
Una de sus últimas responsabilidades como representante del papa Francisco en Venezuela fue presidir la ceremonia de beatificación del doctor José Gregorio Hernández, conocido como «el médico de los pobres», un acto que, según explicó ese día, deseaba que se produjera desde su llegada al país.
Con información de: EFE /