Euseglimar González | LA PRENSA.- Fue por unas empanadas y lo asesinan. Un joven fue tiroteado el domingo en la mañana mientras que comía en un local en Tintorero.
Leoner Antonio Amador Suárez, de 21 años, recibió un disparo en el cuello. Aparentemente, dos choros ingresaron a un local ubicado en la calle Roseliano Sequera, en Tintorero. El hecho ocurrió alrededor de las 8:00 de la mañana del domingo. Los tipos querían robar a todos los clientes y uno de ellos le “arrebató la vida a Leoner”.
Unos familiares de Leoner relataron que dos choros llegaron al puesto de comida rápida y le pidieron todo a las personas. “Leoner se levantó para decir que él no tenía nada y ahí fue cuando le dieron el tiro”, contó un familiar ayer que estaba en los alrededores de la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda.
Leoner estaba junto a su novia, quien está embarazada, cuando ocurrieron los hechos. Según relataron los familiares, los hampones le pedían a los clientes que bajaran la cabeza para que nadie les viera los rostros a los delincuentes.
La familia Amador Suárez presumen que como Leoner se paró de la mesa, uno de los delincuentes le disparó pensando que él se iba a resistir al robo. Luego del disparo los choros huyeron en moto del sitio.
Las personas que se encontraban en el lugar lo auxiliaron y lo trasladaron en un carro particular hasta el hospital de Quíbor, pero cuando fue ingresado falleció.
Toda su familia está residenciada en Carora y se enteró de lo sucedido en la tarde. Cuentan que el domingo no se fue a casa de sus padres porque no había transporte público por ser un día feriado y decidió quedarse con la novia.
“Él era un muchacho muy emprendedor. Quería buscar nuevos horizontes y viajó a Ecuador, Argentina y Uruguay”, sostuvo un familiar de la víctima.
Se pudo conocer que Leoner estaba estudiando segundo semestre de Matemáticas. Estaba trabajando con un tío la agricultura y era comerciante de teléfonos. Sobre los hechos, los parientes detallaron que él fue el único que salió herido.