viernes, 22 noviembre 2024
viernes, 22 noviembre 2024

Lo caen a tiros dentro de su vivienda para robarlo

Anaís Mendoza | LA PRENSA.- A la 6:40 de la mañana de ayer tocaron el portón de la vivienda de Richard David García Baptista (29) ubicada en la calle 1 de José Felix Ribas. To­mó la llave y abrió el candado, y penas haló el por­tón cuatro hampones lo apuntaron, de inmediato corrió hacia dentro de la vivienda, pero uno de los malandros le disparó hasta matarlo.

Richard todos los días se paraba a esa hora para abrirle el portón a su her­mana, que llegaba para trabajar en la bodega que ambos atendían en un lo­cal que tiene la casa. La hermana relata que Richard tal vez pensó que era ella la que tocó, y por eso abrió con seguridad.

Pero esta vez no fue así, y es que cuatro delin­cuentes llegaron a la casa con la intención de ro­barlo. Al parecer cuando él abrió el candado y haló el portón a un lado uno de los malandros lo apuntó.

“Mi hermanó abrió el candado y lo colocó aquí encima de esta caja de basura, apenas se asomó uno de los malandros le soltó el primer disparó, él salió corriendo hasta sa­la, y cuando estaba abriendo la puerta le dis­pararon tres veces más”, contó la hermana mien­tras trataba de sostener el llanto.

El comerciante alcanzó a meter la llave la cual partió en la puerta de la sala, de hecho sólo pudo girar una sola vez la ce­rradura y por eso no pu­do cerrar la puerta, que además tenía muchos rastros de sangre. Richard se desvaneció y al caer al suelo el ham­pón le disparó en el pe­cho, abdomen y la cabe­za. Los cuatro malandros andaban con suéter ne­gro y se taparon las caras, según describen los veci­nos que los vieron cómo salieron de la casa.

Luego se asomaron y vieron a Richard sin vida y le avisaron a la familia que vive en el barrio 12 de octubre cerca del lu­gar. Fue el esposo de la hermana que lo vio muerto en sala, después llamaron a la policía.

Un guerrero

Richard vivía sólo en la casa que con mucho es­fuerzo estaba constru­yendo con sus propias manos. Hace tres meses llegó de Panamá, y con el dinero que hizo trabajan­do como albañil en ese país lo invirtió en la bo­dega y en la casa.

“Él mismo pegó la cerá­mica, mi hermano era un buen hombre, todos los vecinos lo querían, él estaba construyendo la casa, tenía muchos pla­nes, le arruinaron la vi­da”, comentaba con sere­nidad la muchacha.

La dama también acotó que el lunes en la tarde un vecino que vive detrás de la casa de Richard le advirtió que se cuidara pues cuatros malandros se metieron a robar en su casa, pero el señor con un machete los corrió, entonces la herma­na le pidió que estuviera pendiente.

El mismo día por pre­vención, Richard clavó unas tablas en la pared de la cocina y las frisó con cemento, ya que en­tre los bloques, había un espacio. Richard era el menor de cinco herma­nos y el único varón.

Noticias relacionadas

No te pierdas

Dos motos le quitan la vida a un octogenario

La rutina de José Isabelino Castillo de caminar a primeras horas de la mañana se transformó en fatalidad este miércoles, al ser arrollado por...

Redes sociales