Lorena Rojas | LA PRENSA DE LARA.- No conocer a profundidad la ciudad le costó la vida. Un menor barquisimetano, de 14 añ;os, falleció tras ser arrollado por un bus de Trasantiago cuando se dirigía a la parada de la avenida Central con Pasaje 23, en Santiago, capital de Chile. El jovencito vivía con su familia en La Carucieñ;a y tenían menos de tres meses de haber migrado.
Cerca a las 6:00 pm del martes, el joven venía de la casa de su hermano, ubicada en el sector Lo Espejo, ya que él le había dicho que fuera a buscar una bicicleta que le tenía como obsequio para que se pudiese movilizar a lugares cercanos. A bordo de la bicicleta cruzó en el sentido del Transantiago, cuyo chofer se lo llevó por delante.
El conductor del bus no se percató del impacto y el joven cayó al piso y fue alcanzado por uno de los cauchos en las piernas. El muchacho se arrastró para intentar escapar de las morochas de la misma unidad; sin embargo, no lo logró. La cabeza quedó aplastada.
El chofer de la unidad se detuvo cuando sintió que había pisado algo duro. Pero ya era demasiado tarde, el joven murió ipso facto.
En vista de que el muchacho no llegó a su casa la noche del martes, sus padres lo reportaron como desaparecido. Pero el miércoles, autoridades policiales les informaron que en la morgue había un cuerpo sin identificar y que podían acercarse para descartar.
A sus padres se les destrozó el alma cuando vieron en una camilla el cadáver de su hijo, es allí cuando las autoridades de Santiago informaron que había sido arrollado. Por redes circularon videos del accidente.