Euseglimar González | LA PRENSA.- Roba, corre y lo tirotean. Jorge Antonio Vásquez Yépez (21) fue asesinado de un disparo en la espalda la madrugada de ayer en el sector La Montaña de Palavecino. El cuerpo quedó dentro de un club familiar y los propietarios se llevaron tremenda sorpresa al ver al muchacho.
Supuestamente, Jorge estaba robando en una casa cuando fue sorprendido y presumen que uno de los vecinos lo “pilló” robando y le disparó. El chamo salió corriendo malherido y cayó muerto en el club familiar “El Roble”.
Se conoció por fuentes policiales que Jorge había estado preso hace un tiempo por el delito de robo. Supuestamente, la esposa también estuvo presa en la cárcel de Uribana.
A las 3:30 de la madrugada los vecinos comenzaron a escuchar a los perros ladrar. Una vecina detalla que se levantó de su cama para saber qué pasaba. Revisó toda su casa y estaba bien, pero vio cómo dos mujeres y un hombre corrían por la calle de tierra. Cuenta que ella les preguntó qué ocurría, pero no les respondieron.
Decidió irse de nuevo a su casa, pero lo primero que hizo fue ir al club que tiene la familia, encendió las luces y revisó los baños. Los perros seguían ladrando y cuando volteó hacia donde estaba el tanque, justo al lado, estaba un hombre.
“¡Ay hermano. Ahí hay un hombre acostado. Ni se te ocurra salir del cuarto, quédate ahí!”, le decía la mujer a su hermano, quien cuida el club.
Detalla que ella se acercó hasta donde estaba el hombre, pero lo vio que estaba muerto. Nerviosa salió corriendo del sitio y se fue a buscar a los funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) para que resguardaran el sitio.
En los alrededores del local estaban las dos mujeres y el hombre, quienes buscaban a Jorge. Cuando una de las propietarias del club llegó de nuevo al sitio, aparentemente una de las mujeres le preguntó si adentro estaba el muchacho. Fue ella quien les confirmó que Jorge estaba muerto.
“Yo a ese muchacho primera vez que lo veía, pero a las mujeres sí las había visto. Les informé que en el local estaba el muchacho muerto, pero que no podían entrar porque no había funcionarios”, dijo la vecina.
Según versiones que se escucharon en el sitio, supuestamente, Jorge estaba robando una casa y una mujer le “cantaba” la zona, pero los vecinos de la comunidad por miedo no salieron de sus viviendas. Vecinos contaron que en la madrugada no escucharon tiros.
“A ese muchacho tuvieron que tirotearlo a unas cuantas casas de aquí, porque no escuchamos nada. Ese chamo ya venía herido”, comentó un vecino.
Al parecer, Jorge saltó la pared y pisó el tanque de agua del club, el plástico quedó hundido, pero como ya estaba malherido cayó bocarriba y murió. Familiares y allegados hablaban entre ellos y comentaban que el chamo, supuestamente, cargaba un revólver, pero la información no pudo ser confirmada.
El Eje de Homicidios del Cicpc llegó hasta la escena del crimen para hacer el levantamiento del cuerpo y trasladarlo hasta la morgue.