Guiomar López | LA PRENSA DE LARA.- Con una mirada esquiva y un caminar lento, así avanzaba Jesús Manuel Ocanto López de 37 años. Nada que ver con la imagen del «Monstruo de Patarata», como fue bautizado por el temor que causó a alrededor de 30 menores y jóvenes. Se valía de su condición de entrenador de voleibol de playa en el complejo Variquisimeto, para ganar su confianza y acosarlas con material de actos lascivos.
Fue presentado por el general de Brigada, Luis Peña, titular de Polilara, quien confirmó que fue detenido la tarde del 15 de enero por funcionarios de la DIEP de este cuerpo policial, luego de 15 días de investigación. Es investigado por el delito de abuso sexual, quien se ganaba la confianza de las víctimas y luego las amenazaba con divulgar fotos o videos comprometedores.
Ocanto enviaba hasta material audiovisual suyo con escenas subidas de tono, a fin de provocar una respuesta de aceptación. Una conducta que aprovechaba con las deportistas y hasta con vecinas, cuando la mayoría de los conocidos ni sospechaban de este lado oscuro del entrenador.
Peña recalcó que fue un arduo trabajo de inteligencia, de rigurosa observación y tratar de ir recabando las evidencias, así como ubicar en las residencias dónde podría estar escondiéndose para evadir a la justicia. Así estuvieron llegando más cerca, rastreando teléfonos y hasta dar con sus pasos.
Por lo delicado del caso, siguen los estudios y aún no tienen confirmado, si se concretó alguna relación sexual, porque no se tienen los exámenes forenses. Pero todo indica que «El monstruo de Patarata» era un obsesivo con material altamente erótico y acudía a la amenaza, entre reiterados chantajes a sus víctimas.