José D. Sequera | LA PRENSA de Lara.- En medio de gritos de «libertad, libertad» y llantos de alegría, los 23 detenidos durante las protestas antigubernamentales en Barquisimeto del 30 de abril y 1 de mayo quedaron libres, con una medida de régimen de presentación cada 30 días durante los próximos cuatro años.
La emotiva liberación ocurrió en la puerta de los tribunales del Edificio Nacional a eso de las 5:45 de la tarde. Los familiares de los detenidos estaban allí desde las 9:00 de la mañana esperando por la ansiada noticia.
No fue sino hasta las 5:15 de la tarde cuando el equipo de abogados, conformado por el Foro Penal y la defensa pública, confirmó la liberación de los detenidos y que «en solo minutos» estarían con ellos.
Tras media hora, les avisaron que los detenidos estaban saliendo por la puerta de los tribunales, y los familiares pegaron la carrera hasta la puerta de metal negro, por la que poco a poco iban saliendo los detenidos, vestidos con mono azul y franelas amarillas.
Los abrazos se confundían y los gritos ensordecían. Con sus teléfonos celulares, familiares captaban fotos y vídeos del tan anhelado reencuentro que ellos esperaron por dos meses y dos días.
Algunos detenidos decidieron cambiarse la ropa con la que habían salido esa mañana del Desur-Lara (lugar donde estaban detenidos); los más osados tiraron la franela amarilla frente al edificio. «No quiero nada que me recuerde estos dos meses de horror», dijo uno de ellos cuando dejaba su franela en el suelo.