LA PRENSA DE LARA.- Pasado 12 de mayo se «celebró «en Venezuela y a nivel mundial el Día de la Enfermera declarado por el Consejo Internacional de Enfermería en el año 1974 en conmemoración del nacimiento de Florencia Nightingale, acontecido en el año 1820, meritoria mujer europea quien se dedicó a la prevención de enfermedades y cuidados de los enfermos así como a la formación de mujeres en esta loable labor.
Es así como cada 12 de mayo, se celebra a nivel mundial el día de la enfermera, ahora bien, que se «celebra» en Venezuela, pues no hay ninguna celebración en este gremio, ni en las enfermeras activas ni en las jubiladas, lo que existe es una desesperanza que las lleva a un mayor estado de desaliento y con ella un importante desajuste emocional y situacional como está ocurriendo en la mayoría de los gremios nacionales
Por ejemplo, en las enfermeras activas las falencias generales que padecen en el ejercicio de sus funciones, tales como las faltas de insumos, de medicinas, de infraestructuras adecuadas u operativas, fallas en los servicios básicos, alimentación inadecuada a los pacientes hospitalizados, en algunos casos en los diferentes servicios, por no decir todos, hay la carestía de médicos especialistas para una atención óptima, la ausencia de normas de bioseguridad, muy notoria en la pandemia del COVID-19 , entre otras, inciden de una u otra manera en el ejercicio de esta noble labor.
Pero cabe resaltar las carencias individuales tales como las de orden económico, en donde de una manera progresiva y acelerada en los últimos años ha ido disminuyendo el poder adquisitivo y no poder cumplir las necesidades básicas fundamentales, entrando en el riego de caer en la pobreza extrema, es así como en el año 2014 , (según la OMS) Venezuela estaba en situación de pobreza extrema en un 25,2% y para finales de diciembre del año 2021 la pobreza extrema estaba en el orden del 75, 6 %, actualmente el sueldo general de una enfermera está en 600 bolívares mensual, sumándoles los bonos y primas, equivalente a 4 dólares al día (en este momento) y para la OMS a partir de un ingreso diario de 1,9 dólares al día, entra la población en pobreza extrema, más en un país donde reina la inflación , especulación y principalmente la devaluación todo alimentado por la corrupción, es de esperar, ante esto, que el gremio de enfermeras prontamente caiga en la pobreza extrema
Entre otras carencias resalta la falta de personal de enfermería en todas las instituciones públicas y hasta en las privadas, según la OMS, en el 2018 en Venezuela había 28.200 enfermeras y deberían ser 115.548 enfermeras y paulatinamente la disponibilidad de personal de enfermería ha ido disminuyendo, así lo expresa la Licenciada Elda Jiménez, presidenta del Colegio de Enfermeras del Edo. Lara, acotando que el déficit de enfermeras en este estado es del 75%
No obstante, la formación de nuevas enfermeras, progresivamente ha disminuido en el transcurso de los decenios, quedando demostrado en la principal escuela de enfermería de Venezuela, ubicada en Caracas donde actualmente hay un 80% menos de estudiantes de enfermerías con un decremento progresivo de la matrícula, por lo tanto, la exigencia laboral de las enfermeras activas es mayor, socavando su resistencia física y mental& ;
Ante esta situación que padece el gremio de enfermerías, ¿que pueden celebrar?, nada, absolutamente nada, solo levantar su voz y alzar el puño en protesta que cada año se incrementa, no llegando estas a los oídos de las autoridades sanitarias y del trabajo, aumentando su desesperación y desaliento, obligándolas a renunciar y hasta emigrar y otras a dedicarse a la economía informal
Recordemos un pensamiento de Martin Luther King Jr.: «No me preocupa el grito de los violentos, de los corruptos, de los deshonestos, de los sin ética, lo que más me preocupa es el silencio de los buenos» … por lo tanto, no solo basta la voz de un gremio, debe ser el conjunto de todos los gremios que al unísono levanten sus voces.
Por último queda claramente evidenciado la violación de los derechos humanos universal en el artículo 3 (derecho a la vida), 25 (derecho a un nivel adecuado de vida) y de la misma Constitución Venezolana y de no corregirse prontamente esta situación la debacle total en el sector salud es inminente, la migración de la mayoría de los médicos y enfermeras, así como la renuncia a sus cargos, la falta de insumos, medicinas, la ausencia de nuevas infraestructura y el mantenimiento adecuado y a tiempo de estas, aunado a los sueldos miserables que atentan a la dignidad humana, hacen imparable el desastre total del sector salud
Por: Dr. Hely Brandt& ;
*La Prensa de Lara no se hace responsable de las opiniones emitidas en los artículos, cuyo contenido es de entera responsabilidad de sus autores*.& ;