Osman Rojas | LA PRENSA.- Una queja tras otra se escucha en las adyacencias del Hospital Central Antonio María Pineda. La escasez de insumos médicos y la denuncia por supuesto maltrato irrita a los familiares de pacientes recluidos en el principal centro médico de la región.
“Nos tratan como si fuésemos animales y a los pacientes los ven como mendigos. Los porteros se creen amos y señores del hospital y nos insultan, nos gritan y hasta nos amenazan con no dejarnos pasar en las horas de visita”, denuncia Anthony Castro, quien tiene a su abuelo hospitalizado en el área de emergencia desde el pasado fin de semana.
La escasez de insumos médicos que hay en el hospital es otro de los factores que lleva al enfrentamiento verbal entre familiares y trabajadores.
“Aquí piden hasta los guantes para poder tratar a los enfermos y Henri Falcón sale todas las mañanas diciendo en radio y televisión que no falta nada en el hospital. O el gobernador nos miente o aquí se roban las cosas”, continuó Castro.
Los familiares denuncian que en el Antonio María Pineda también se maneja la figura del “enchufado”, pues al que conocen le dan insumos. “Basta que llegue la comadre de fulanito para que la solución aparezca”, dice Albina Parra, hija de una señora recluida en el Hospital Central.
Además de las quejas por la escasez de insumos los usuarios piden que se mejore la seguridad y es que, según cuentan, de 9:00 pm a 5:00 am el hospital es tierra sin ley para los delincuentes.