María L. De Sousa | LA PRENSA DE LARA – Por& ;la llegada de una delegación del Reino de Noruega a Venezuela, los llamados opositores radicales: Maria Corina, Machado Antonio Ledezma, Diego Arria, Humberto Calderón Berti, Carlos Ortega y Enrique Aristeguieta Gramcko emitieron un comunicado aclarando que: «Para nosotros comprometidos con el rescate de nuestra Libertad, este asunto es un capitulo cerrado».& ;
Así indicaron que rechazan la posibilidad de que en el país se emprenda una nueva ronda de negociaciones con el gobierno de Nicolás Maduro, por lo que puntualizaron:& ;
1. Llamamos la atención que de producirse un nuevo proceso del llamado diálogo, seria el número 13, mecanismo que solo ha servido para que la narcotiranía extienda y profundice su control del poder, en medio de nuestra gente cada vez más martirizada.
2. Es evidente que los diálogos solo han beneficiado a la narcotiranía para desmovilizar las multitudinarias manifestaciones de protesta y de rechazo al régimen, realizadas por la resistencia venezolana dentro y fuera del país desde el 23 de enero de 2019.
3. No puede calificarse de» logro» un acuerdo que reincorporó a la Asamblea Nacional a los ex diputados del partido (PSUV), cuyos derechos habían perdido al retirarse del cuerpo legislativo. En adición fue un acto inconstitucional que le ha permitido a estos operadores de la narcotiranía sabotear el funcionamiento de la Asamblea Nacional.& ;
4. El Estatuto para la Transición, dictado por la Asamblea Nacional, definió claramente una estrategia para unificar a todos los sectores políticos, sociales y económicos del país, comenzando por luchar para que se produzca el Cese de la Usurpación, indispensable para instalar un gobierno de transición que se encargaría de organizar un proceso electoral indepediente, libre y transparente, que le permita a los electores venezolanos elegir nuevos mandatarios y poderes públicos, auténticamente democráticos y libres.& ;& ;
5. Reiteramos nuestro profundo e invariable agradecimiento por la firme solidaridad manifiesta de los gobiernos democráticos del mundo libre, y muy en especial, a los de los Estados Unidos, de Colombia y de Brasil, nuestros vecinos que nos vienen acompañando en nuestra lucha por rescatar y liberar a Venezuela del secuestro del que es víctima, por parte de una corporación criminal asociada al narcotráfico, al terrorismo internacional, y culpable de los más escandalosos hechos de corrupción y crímenes de lesa humanidad en toda las Américas.
6. Reafirmamos que es imposible aún participar en procesos promovidos, organizados y controlados por mafias criminales, tanto locales como internacionales que se han apoderado de nuestro país.& ;