Agencias | LA PRENSA DE LARA.- El presidente argentino, Javier Milei, ha retomado su agenda para reducir al mínimo el Estado tras el receso de Navidad. En su tercera semana de Gobierno, el mandatario ha firmado un decreto que cesa los contratos de trabajadores estatales que ingresaron en el último año.
El Gobierno calcula que son «más de 5.000? los afectados, mientras que otras fuentes, como la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), estiman que la cifra supera los 7.000. El número podría crecer, ya que el Gobierno también revisará en los próximos 90 días los contratos de trabajadores del sector público empleados antes del 1 de enero de 2023, y los sindicatos están en alerta.
El decreto publicado este martes en el Boletín Oficial establece que no se renovarán los contratos de trabajadores del Estado firmados a partir del 1 de enero de 2023.
La medida contempla algunas excepciones: por ejemplo, están exceptuados los trabajadores que son parte de «cupos regulados por ley u otro tipo de protecciones especiales», como las personas con discapacidad, o el personal que es considerado «indispensable» para una jurisdicción. El texto también anticipa que el resto de los contratos será sometido a «un relevamiento exhaustivo» en los próximos 90 días.
En su primer discurso como presidente, Milei ya había anticipado que el ajuste que promete su Gobierno lo pagará el Estado y no el sector privado. El recorte empezó por el Gabinete de Ministros, cuando el ultraderechista limitó el número de carteras a nueve, la mitad de los que había en la gestión anterior. El ministro de Economía, Luis Caputo, anunció como parte de las primeras medidas económicas la reducción de la plantilla estatal. El decreto publicado este martes es un paso más en la hoja de ruta del Gobierno y apunta a «lograr un mejor funcionamiento de la Administración pública», reseña El País.
El sector público argentino cuenta en total con casi 3,5 millones de empleados asalariados, según los últimos datos del Ministerio de Trabajo, de los que una décima parte pertenecen a la Administración nacional. El gasto en personal de estos últimos representa el 2,2% del PIB, de acuerdo a un informe de la consultora Ieral – Fundación Mediterránea, un porcentaje que se ha reducido desde 2015, cuando era del 3,3% del PIB. Según ese análisis, la participación del empleo público en el presupuesto «está cerca de los países escandinavos y en las antípodas de Japón y Alemania».
Fuente: El País& ;