Daimar Díaz – LA PRENSA de Lara .-& ;Tres meses sin agua potable en Aguada Grande, municipio Urdaneta causó la furia de los habitantes quienes salieron a protestar en la calle Comercio, pleno centro de la zona, para exigir el restablecimiento del servicio.
Al menos 250 familias distribuidas en cinco sectores son las afectadas por la falta del suministro de agua potable, quienes aseguran que adquirir el líquido mediante camiones cisternas implica un gasto que no pueden costear, pues por cada mil litros deben pagar Bs. 150 mil.
«El pueblo se cansó de pasar sed y salió a las calles a exigir sus derechos. Por parte de la alcaldía sólo dicen que todo está bien y que el agua no llega porque hay tomas clandestinas», agregó muy molesto José Suárez, dirigente político del municipio.
Debido a la obstaculizan del acceso vial, los cuerpos de seguridad se hicieron presentes para dispersar a los protestantes, quienes accedieron a retirarse tras la promesa de un funcionario de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) de ir junto a una comisión de vecinos a realizar la desconexión de las tomas ilegales, para que así puedan contar con agua en sus hogares.