Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- Según Marco Asuaje, presidente de la Cámara Inmobiliaria en Lara, actualmente no hay obras de interés social ejecutándose. «El Estado sólo está haciendo algunas casas en específico, no a gran escala», resaltó. En cuanto al sector privado, tan sólo contabilizan dos proyectos que están en fase de culminación, una nueva etapa de la urbanización Colinas del Viento en la entrada de Barquisimeto, al este, y una segunda torre de Parque La Música. En el 2012, en el estado el sector privado llegó a construir 5 mil viviendas al año, en su pico histórico más alto.
«El gran culpable es el Estado venezolano, que se dedicó a una cacería de brujas contra aquellos empresarios exitosos que construían miles de viviendas al año. Incluso haber contratado empresas extranjeras para construir afectó el empleo nacional. Adicionalmente, existe una escasez de materiales de construcción, nadie puede proyectar una obra sin tener garantizados los insumos en el mercado. Aquí expropiaron las cementeras y eso creó mafias del cemento, expropiaron la Siderúrgica del Orinoco (Sidor), y se crearon mafias de las cabillas, de arena. Además, no hay incentivos de créditos bancarios, ni el constructor ni el comprador a los precios actuales van a poder adquirir un inmueble sin la ayuda del crédito bancario», explicó
Ronald Arias agregó que hasta el 2012 la empresa privada se mantuvo construyendo. «La debacle comenzó en 2010 cuando se creó la Ley de Emergencia de Tierras Urbanas, la Ley de Estafa Inmobiliaria, la Ley de Arrendamiento, derogaron la Ley de Protección al Deber Hipotecario, que generaron desconfianza», mencionó.