Ana León | LA PRENSA.- Hacer un achante ya no es igual. La inflación también le ha pegado duro a los jóvenes que para poder compartir con sus panas deben hacer una vaca entre todos para comprar los aperitivos y bebidas de sarao.
“Ahora un achante hay que hacerlo con una Coca Cola y un pan de tunja y aún así sale caro. Antes no se gastaba nada”, comentaba Ronald Castillo, un estudiante que hace reuniones frecuentes con sus panas para bajar los niveles de estrés y no perder la costumbre de pasar un rato diferente.
Casi 100 mil bolívares se puede gastar en algo tan sencillo como hacer una sopa. Sólo en ingredientes se puede llegar a pagar 40 mil bolívares sin comprar una caja de cerveza o botella de alcohol. Una parrillada tradicional para los achantes, ahorita sale en más de 200 mil bolívares, si se desea consumir todos los productos incluyendo la cerveza.
“Mi último achante fue el viernes de la semana pasada y lo que comimos fueron una patilla fría y unas manos de cambures porque para eso era lo que había”, comentaba entre risas Ronald pues para él la situación era algo insólita.
Una de las maneras de planificar un buen achante es haciendo las tradicionales vacas, pues todos los involucrados aportan algo para comer o beber y se hace una reunión decente.
“En un achante todos llevan porque sino no se hace nada. Cada quien tiene que colaborar con algo y hacer una reunión de todos: Todos aportan”, admite Angel Castañeda un obrero que le gusta ir a los achantes que se hacen en casa de uno de sus amigos cada dos semanas.
“Cuando hacemos achantes en mi casa yo llamo a 10 o 20 panas para que la cosa sea equilibrada y hagamos algo bien. Todos aportamos. La última vez nos comimos un chivo”, reveló Carlos Querales que estaba caminando con su novia y admitió que durante esas reuniones muchas veces lo que hace es comprar una botellita de cocuy y estar hasta tarde despierto hablando de mujeres.
El tradicional achante ha ido mutando con el pasar del tiempo y el deterioro económico. Algunos tienen la ventaja de poder comer o beber así sean un trago de licor, mientras que otros optan por solo disfrutar de un momento con los amigos y la familia sin mucho cuento pues saben que lo importante no es lo que se consume sino con quien se está.