Roselis de Leca | La Prensa.- A 100 galpones de Mercabar los revisaron de cabo a rabo y determinaron que 69, de las áreas verde y amarilla han sido supervisados y fichados como “irregulares” porque están, en su mayoría, subutilizados.
“La mayoría están vacíos, sin mercancía, engordando el local, algunos son subutilizados para fines no estipulados y otros no cumplen con los avisos de identificación”, explicó Miguel Valecillos, gerente General de Mercabar cuando detalló las supervisiones que han realizado en el Mayorista. Explicó que de la revisión emitieron siete órdenes de desalojo y cese de contrato para reactivar esos locales.
Desde diciembre se lleva a cabo este proceso, donde se pretende constatar la solvencia de los arrendatarios. Tras el chequeo y dependiendo las faltas en las que ha incurrido el inquilino, se llega a acuerdos para hacer cumplir las normativas legales establecidas.
“Quienes cometan irregularidades graves se desaloja y queda automáticamente adjudicado a otro arrendatario”, dijo Valecillos, al tiempo que recordó que los espacios son propiedad de la municipalidad, por lo que la medida de recesión y otorgamiento de contrato es discutida conjuntamente con la Alcaldía de Iribarren.
Expropiación
Comerciantes afectados denuncian que el cese de contrato y desalojo de galpones es totalmente arbitrario. “Primero nos cerraron temporalmente en diciembre por no tener mucha mercancía, ahora nos sacan violentando nuestros candados de seguridad. Esto es una expropiación”, narró molesta Omaira Rodríguez, quien debió sacar la mañana de este lunes el escaso inventario que tenía en el galpón 5B1, el cual expedía granos, condimentos y alimento para mascotas.
La inquilina señala tener más de 20 años con el puesto, añadió que nunca se le notificó sobre el desalojo ni sobre alguna infracción legal, por lo que fue tomada por sorpresa.
“Alegan que los estamos engordando, pero qué voy a engordar si tengo 20 años aquí y no hay mercancía qué vender, no es mi culpa”, dijo.