Moiselis Méndez | LA PRENSA DE LARA.- En total abandono se encuentra la Escuela Bolivariana Padre Diego ubicada en el sector Padre Diego del kilómetro 23 hacia la carretera vieja de Carora, en el municipio Iribarren. Representantes y educadores denuncian que actualmente las condiciones de insalubridad impiden impartir clases presenciales.
La escuela es el centro de educación de al menos 140 niños, que reciben clases desde preescolar hasta 6to grado de primaria. Los menores se preparaban para el regreso a su ambiente escolar, sin embargo, los padres y representantes al ver la cantidad de monte en el que se encuentra sumergida la institución, manifestaron su deseo de postergar el regreso a las aulas, pues alertaron que por la zona se han visto serpientes que podrían poner en peligro la vida de los estudiantes y profesores. También denunciaron que el sector carece del agua potable.
Las condiciones son el rastro de al menos un año y medio de cierre por la pandemia de covid-19, al ingresar por la puerta principal, una montaña de monte arropa los alrededores de la escuelita y en la parte trasera lo primero que se observa es un vertedero improvisado con bolsas de basura amontonada, ya que la recolección de desechos se ha visto en decadencia.
Según testimonios de padres y profesores, han tenido que agarrar agua de lluvia para poder solventar la limpieza en la institución y esta es costeada por los mismos representantes, ya que los entes gubernamentales no han dotado de equipos de limpieza ni de kits de bioseguridad.
Se han reportado casos de coronavirus en las comunidades aledañas a la institución, lo que también crea preocupación en la comunidad estudiantil.
Representante indicaron que la situación de los baños podría representar un foco de infecciones para los pequeños, actualmente muchos inodoros están sin tapa, sin agua, mientras que los lavamanos no cuentan ni siquiera con grifos para su funcionamiento.
El deterioro es general, algunas tanquillas están rotas y las paredes se están desconchando.
A las malas condiciones de infraestructura, se le suma los bajos sueldos que percibe el personal docente, quienes se ven entre la espada y la pared.
Padres manifestaron su deseo de regresar a las aulas y su preocupación por la educación de sus hijos, por lo que conversaron con las autoridades para pedir un cese de actividades presenciales hasta la visita y solución de la problemática por parte del Gobierno regional.
La exigencia es que tomen en cuenta a la institución en el plan «Una Gota de Amor» porque a pesar de que las clases en línea representan una solución viable, en el sector las antenas de comunicación no funcionan, lo que dificulta a los estudiantes el acceso a internet para hacer sus tareas y evaluaciones.