Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- La banca tiene siete años consecutivos de contracción económica, y en este tiempo han sido cerradas 3866 oficinas bancarias aproximadamente según datos que maneja la Federación de Trabajadores Bancarios (Fetrabanca). Claudio Rivas, su presidente alega que uno de los principales problemas es que el gobierno se ha empeñado en mantener un alto encaje legal, que desde este lunes 20 de enero pasó 93 % a 85 %, lo que todavía hace cuesta arriba otorgar créditos al sector privado.
Eso representa que de cada 100 bolívares que reciba la banca por conceptos de depósitos, 85 se quedan retenidos en el Banco Central de Venezuela (BCV), sin poder financiar créditos la banca deja de percibir intereses, una de las principales fuentes de ingreso para mantenerse.
Según los informes mensuales publicados por la Superintendencia de las Instituciones del Sector Bancario de Venezuela (Sudeban), en 203 funcionaban cerca de 7000 agencias bancarias. Los años de mayor reducción han sido 2019 y 2020. «En marzo de 2019 estaban en funcionamiento 3.373 agencias bancarias y a marzo de 2020 había 3.134, lo que representa una caída de 7,08% en apenas un año», apuntó Rivas.
Indicó que está contracción también representa la reducción de nóminas por la crisis económica, impulsada por 38 meses consecutivos de hiperinflación. «Hay un desconcierto en la masa trabajadora al ver que sus ingresos no alcanzan como medio de sustento, el sector que en otrora era uno de las más grandes empleadores en la actualidad está colapsando. La caída del recurso humano persiste. En marzo de 2019 se contabilizaban 54.146 empleados del sector bancario y en marzo del 2020 la cifra era de 46.457, una reducción de personal aproximada de 14%», expresó.
Cuando Nicolás Maduro asumió el poder en Venezuela en 2017 la Sudeban contabilizaba 83.570 trabajadores, lo que representa que se han perdido 37.113 puestos de trabajo que según Claudio Rivas la mayoría ha migrado a países como Chile, que los contratan en su área y les ofrecen sueldos por encima de los mil dólares.
«Entre los cargos que se han perdido están los de mayor formación y experiencia de la banca, van desde cargos de tesorería, trabajadores de seguridad operativa, subgerentes, jefes de bóveda, agentes de cuenta, secretarias, que prefieren migrar o simplemente se dedican a la economía informal porque sus salarios son miserables, los trabajadores tienen dos años sin discutir contratación colectiva», recalcó.
Afirma que la única salida a la crisis es el cambio del modelo político actual. «La banca venezolana está operando en un entorno difícil que al parecer se ha configurado para destruirla, así no podrá sobrevivir el sector a menos que haya un cambio de dirección en la política económica, de lo contrario el colapso será inminente», comunicó el representante de Fetrabanca.