Pacientes renales junto a enfermeras de la Unidad de Diálisis El Ángel protestaron este miércoles para exigir al Gobierno nacional que les brinden una mejoría en todos los centros médicos del estado Lara y dar respuestas al tema salarial del personal médico.
Héctor Colmenárez, presidente de la Fundación Amigos del Paciente Renal de Lara (Fundaprel), aseguró que el estado de las máquinas es deficiente y la información que han recibido por parte del Estado es que no hay máquinas para sustituir las que ya cumplieron su vida útil.
Colmenárez consideró que de haber voluntad por parte del Gobierno al momento de montar el presupuesto anual para el área de salud se pudiesen adquirir unas 10 máquinas y destacó que la Asamblea Nacional también puede hacer su aporte, pues en la entidad se necesitan al menos 190 unidades de hemodiálisis.
A esta denuncia se le sumó las condiciones en las que están las unidades, pacientes señalaron que están sin aire acondicionado, hay pocos bombillos, no hay agua, baño inservible, el techo está deteriorado y por último dijeron que hay ratones y cucarachas.
Pacientes exigen nuevas máquinas
Durante el año 2024, los pacientes han pedido al Gobierno nacional que sustituyan las máquinas viejas por unas nuevas, pues las que se encuentran en Barquisimeto ya cumplieron su vida útil y presentan fallas.
Los pacientes de diferentes unidades de diálisis del estado Lara han protestado para exigir mejorías en los centros de salud, además a este rosario de problemas se le sumaron el estado de infraestructuras y falta de fumigación para roedores.
A inicio de mes, Más de 200 pacientes, que son atendidos en la Unidad de Diálisis Barquisimeto, también alertaron la grave situación en la que se encuentra el centro debido a las fallas constantes en las máquinas para el tratamiento de hemodiálisis.
Para ese momento, Anabelle Camacaro, familiar y miembro de la Fundación de Pacientes Renales (Fundapre), denunció la situación precaria de la sede y los problemas de los equipos a los que a diario se deben enfrentar cada una de las personas que reciben tratamiento.
Durante las protestas, tanto familiares como pacientes han denunciado que en los centros no hay ni tensiometros. A esto también se le une que deben disponer de dinero para los exámenes de laboratorio porque en el estado no hay laboratorios públicos.
Por lo general un médico pide a su paciente hematología completa, urea, creatinina y glicemia y pueden gastar alrededor de 20 dólares, que no todo el tiempo disponen de este dinero.